Gina Herrero fue elegida como presidenta de la Asociación Panameña de Aseguradores (Apadea) para el periodo 2023, y cuando tome posesión será la primera mujer en presidir el gremio que agrupa a las principales aseguradoras del país en los 70 años de historia de la organización.
Basta conversar con ella durante media hora para percibir que Herrero respira el seguro por los cuatro costados. Recuerda que desde que era pequeña en su casa “se desayunaba, se almorzaba y se cenaba con temas de seguros”, puesto que tanto su padre como su madre estaban vinculados a la industria. Al iniciar sus estudios de Derecho, ya tenía claro que quería desarrollar su carrera como abogada en una compañía de seguros, una certeza que pocas personas tienen en esa época de la vida.
Además de ser licenciada de Derecho y Ciencias Políticas, tiene una maestría en Derecho Mercantil y diplomados en Finanzas e Inversiones y en Contratación Pública.
Además de una amplia experiencia docente, desarrolló su carrera profesional primero en Aseguradora Ancón, donde llegó a ser vicepresidenta de Fianzas y Legal, y en Aliado Seguros, subsidiaria de Banco Aliado. Herrero recibió el encargo de poner en marcha esta aseguradora hace más de 11 años y hoy en día hace gala de haber logrado un crecimiento importante y mantener resultados técnicos favorables para la compañía.
Ahora, ve la oportunidad de ser presidenta de Apadea como una forma de devolver a la industria parte de lo que recibió y, como mujer, destaca que se trata de un hito, al ser la primera en ostentar el cargo en la historia del gremio.
Recuerda que hace 25 años, cuando iniciaba su carrera profesional, notaba que le costaba acceder a puestos de trabajo por ser mujer o que la primera vez que se sentó en una posición en la directiva de la Apadea sentía que estaba invadiendo un espacio habitualmente ocupado por hombres.
Ahora, con el camino andado por profesionales como ella, señala que no siente discriminación en el sector, que en el grupo empresarial donde se desempeña hay varias mujeres ocupando cargos gerenciales y que siente el apoyo de todos sus colegas, tanto hombres como mujeres, para trabajar por Apadea y por el de sector seguros en Panamá.
Uno de sus objetivos al frente del gremio es fortalecer la educación en seguros, porque una de las carencias que ha notado es la falta de personal con experiencia en la industria, en parte porque las personas “no nos tienen en el radar como una carrera”.
Así que su objetivo es crear un semillero de profesionales que dentro de 10 o 15 años puedan estar sentados en posiciones como las que ella ocupa.
Herrero tomará las riendas de Apadea tras una serie de años marcados por la pandemia del nuevo coronavirus y la recuperación económica de la crisis que provocaron las restricciones impuestas por el Gobierno.
Señala que la pandemia ha elevado el nivel de concienciación de la población en general para adquirir seguros de salud, como demuestran las cifras de la Superintendencia de Seguros y Reaseguros, que reflejan un crecimiento interanual superior al 13% en número de pólizas vigentes al cierre del mes de octubre.
También nota mayor apetito por seguros de accidentes personales y señala que tras la explosión ocurrida el pasado mes de noviembre en un edificio en Obarrio, también ha elevado la conciencia por las pólizas multirriesgo.
Destaca que una de las lecciones que dejó la pandemia es la importancia de los seguros, que desembolsaron más de $140 millones para cubrir siniestros provocados por la Covid-19, y esto, dijo, contribuyó a elevar ese nivel de concienciación entre la población.
En ese sentido defendió que “las compañías de seguros no fueron ajenas al duelo del país, sino que fueron solidarias” y que eso contradice la percepción de que uno tiene una póliza de seguro que luego no paga cuando hay un siniestro.
Asegura que cuando se trabaja en una compañía de seguros, se ven siniestros que uno no pensaría que podrían ocurrir, pero que realmente “todo pasa”, recordando además los efectos cada vez más adversos del cambio climático. Así que cuando uno sufre un accidente o una enfermedad, “no hay mayor tranquilidad que saber que tienes una cobertura”, por eso defiende que el seguro “no es un gasto, es una inversión”.
Entre los desafíos que enfrenta la industria están alcanzar mayores niveles de penetración entre la población y lidiar con una inflación que provoca un aumento en el gasto en siniestros y que impacta principalmente los ramos de automóvil y de salud, lo que pone presión sobre las tarifas de los seguros, algo que señala Herrero, así como lo ha dicho en varias ocasiones su predecesor, Carlos Tribaldos.
Para el año 2022, la expectativa de la industria es cerrar con un crecimiento alrededor del 6% en primas suscritas, mientras que para 2023 Herrero señala que se espera un desempeño similar, y que podría ser algo superior dependiendo de la ejecución de proyectos de construcción, que pueden mover el indicador porque generan pólizas de cuantías importantes.