El presidente, José Raúl Mulino, anunció que implementará algunas acciones para reducir la evasión del Impuesto de Transferencia de Bienes Muebles y Servicios (ITBMS) en el país.
Según el ministro de Economía y Finanzas, Felipe Chapman, la evasión del ITBMS es de aproximadamente $1,500 millones. Además, Camilo Valdés, director de la Dirección General de Ingresos (DGI), informó que la morosidad total en el pago de impuestos asciende a $3,210 millones.
Mulino explicó que se están considerando iniciativas para fortalecer la recaudación de impuestos, entre ellas, una propuesta para simplificar el proceso, de manera que los comercios que retienen el ITBMS envíen de forma más ágil los pagos, directamente al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Los pagos actualmente son directos, pero, se reportan a la DGI, entidad adscrita al MEF, cada mes o trimestralmente, según la actividad económica.
Mulino dijo que el envío directo ya es utilizado en otros países, y tiene como objetivo reducir la dependencia de los comercios como agentes de retención, eliminando la posibilidad de fuga de estos fondos.
“Es una medida que exploraremos legalmente porque permite al MEF recibir los fondos sin depender de supermercados, tiendas y restaurantes, que a menudo retienen el ITBMS y lo transfieren un mes después”, expresó el mandatario.
Fuentes del sector tributario indicaron que existe un plan para que la información de la factura electrónica le permita a la DGI, al momento en que se emite el documento, cuánto se está reteniendo en los comercios y establecimientos por el ITBMS. Con ello, se tendría una previsión de esos recursos y se podría verificar el cumplimiento y pago correspondiente.
El ministro Chapman aseguró que, a pesar de la magnitud de la evasión detectada en el ITBMS, no se contempla un aumento de impuestos para el año 2025. En cambio, el gobierno se enfocará en fortalecer la DGI para optimizar la recaudación y combatir la evasión.
La propuesta de enviar el ITBMS directamente al MEF podría transformar la administración de este impuesto en Panamá, permitiendo un flujo de ingresos más eficiente y transparente, y reforzando así la estabilidad fiscal del país.