Si el contratista Grupo Unidos por el Canal (GUPC) cumple con el plan de terminar a principios de 2016 la construcción del tercer juego de esclusas, en abril del próximo año la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) estará operando la vía ampliada.
El administrador de la ACP, Jorge Luis Quijano, se siente optimista de que todo saldrá como está planeado para echar a andar el mayor proyecto del país, que además de un nuevo servicio para la industria marítima, debe generar más ingresos al Estado panameño.
“Es una gran responsabilidad porque se trata de un compromiso similar al que adquirieron los panameños cuando Estados Unidos revirtió al país el 100% de la administración de la vía”, dijo Quijano durante una entrevista con este diario antes de su partida para Asia, donde se reúne esta semana con varios clientes del Canal.“Hay una gran oportunidad con la ampliación, demostrarle al mundo que fuimos capaces de hacer la inversión más grande creyendo en nosotros mismos. Así como tomamos la responsabilidad en 2000, ahora es el hito de 2016”, dijo Quijano, al referirse al inicio de operaciones de la ampliación.
En estos momentos el proyecto, que incluye todos los contratos a un costo estimado de $5 mil 250 millones, tiene un avance de 86%. El diseño y construcción del tercer juego de esclusas, el contrato más grande que se adjudicó GUPC por $3 mil 200 millones, registra un 84% de adelanto.
La mayor parte de los trabajos pendientes corresponden a la instalación y operación de las 16 compuertas y las 158 válvulas, además de los cuartos de control de cada esclusa, entre otros.
El vaciado de concreto está casi a un 100%. Hasta la semana pasada se había colocado en su nicho la quinta compuerta en el sector Pacífico y la séptima del Atlántico, con lo que suman 12 las estructuras de acero colocadas, de las 16 que componen las nuevas esclusas.
El siguiente paso, después de completar la instalación de las compuertas, es inundar las esclusas. Se tiene previsto comenzar este proceso en junio próximo en el Atlántico. No se trata de una operación sencilla.Quijano calcula que tomará más de seis semanas llenar de agua toda la esclusa. Primero se vertirá agua hasta el primer nivel de la cámara interna. Luego se irá al próximo nivel para comprobar si la compuerta puede poner peso sobre los rieles bajo el agua. Con la flotación, el peso de casi 4 mil toneladas de una compuerta se reducirá a unas 300 toneladas.Cuando se haya logrado comprobar que los sellos de las compuertas no tienen escape, se podrá comenzar el proceso de prueba, que a diferencia de las esclusas actuales, deben correr sobre un riel. Las compuertas deben abrir y cerrar dentro de cada esclusa en un tiempo promedio de cinco minutos. Las compuertas del Canal actual toman aproximadamente dos minutos para abrir o cerrar. La inundación también se debe hacer en el Pacífico y seguir el mismo proceso.Es un tema de aprendizaje, dice Quijano, ya que cuando se instaló la primera compuerta en su nicho se demoró más de tres horas, pero luego esa operación se redujo a una hora.Para que las esclusas sean utilizadas por las embarcaciones comerciales, antes se requiere repetir varias veces la prueba de llenar y vaciar las cámaras, además de cerrar y abrir las compuertas.Lo importante es que arranque la operación de las esclusas, indica Quijano, quien es consciente de que después habrá que completar muchos trabajos adicionales en carreteras, canalizar aguas negras y pintura.Si las operaciones comienzan en abril de 2016, los ingresos que se generen de las nuevas esclusas para ese año fiscal, solo corresponderán a seis meses. A la par de este proceso también se debe completar la preparación de los prácticos que operarán las embarcaciones. Aunque la mayoría de ellos ha recibido capacitación en el simulador, la ACP fletará una embarcación que servirá para hacer pruebas.Además se construyen dos lagos pequeños en el área de Summit que se conectarán por un paso de agua similar al corte Culebra, para hacer pruebas con embarcaciones pequeñas que se construyen en Francia.Estos lagos deben estar terminados en junio y los barcos de prueba deben llegar a Panamá en septiembre. El sistema de operación para que transiten los buques es diferente a las esclusas actuales, ya que en lugar de locomotoras que corren sobre rieles para guiar a los barcos, en las nuevas esclusas se utilizarán remolcadores que impulsarán las embarcaciones dentro de las cámaras de las esclusas.Este es uno de los grandes retos que se presenta para los prácticos y operadores de remolcadores, pero Quijano está convencido de que no habrá inconvenientes.
Quijano envía declaración patrimonial a la Asamblea
El administrador de la Autoridad del Canal de Panamá, Jorge Luis Quijano, enviará a la Asamblea Nacional la declaración jurada de su estado patrimonial hecha mediante escritura pública 18,943 del 25 de septiembre de 2012 en la Notaría Segunda de Circuito de Panamá. Esta declaración la deben hacer todos los funcionarios de jerarquía en atención a lo establecido en el artículo 304 de la Constitución Política de la República de Panamá. El documento de tres páginas, con fecha del 17 de octubre de 2012, fue enviado al secretario general de la Contraloría General de la República, Edwin Raúl Herrera, en cumplimiento de la Ley 32 del 8 de noviembre de 1984. Quijano declaró ingresos en salarios por 215 mil 823 dólares en 2010 y 222 mil 906 en 2011, además de 32 mil dólares provenientes del alquiler de propiedades en 2010 y 36 mil dólares en 2011. También incluye ingresos de 61 mil 242 dólares por pensión del sistema de jubilación del servicio civil en 2010 e igual cantidad en 2011. Declaró que es propietario de cinco fincas ubicadas en diferentes puntos de la provincia de Panamá. Cuentas corrientes y de plazo fijo en diferentes instituciones bancarias y financieras que suman un millón 680 mil 599 dólares. Igualmente reporta 500 acciones al portador, sin valor nominal, de la sociedad Venture, S.A. y 100 acciones nominativas con valor de 100 dólares, cada una. Una camioneta BMW X5 de 2006 con un valor estimado de 19 mil 523 dólares y un sedán BMW 523i de 2011 con un valor estimado de 43 mil 350 dólares. En entrevista con este diario, el administrador dijo que parte de su patrimonio proviene de ahorros personales y de la herencia de un terreno que dejó su padre a él y sus hermanos, y que después de la venta, le correspondió casi un cuarto de millón de dólares.
