La reactivación de la economía tras el fuerte desplome sufrido en 2020 se está notando en la recaudación de ingresos del gobierno central.
En los cuatro meses completados en abril, los ingresos corrientes totalizaron $2,192 millones, cifra que está 2.3% o $49.3 millones por encima de lo presupuestado para el periodo y de 26.1% o $453.6 millones cuando se compara con el mismo periodo del año anterior, según reportes de la Dirección General de Ingresos (DGI).
El dato mejora sustancialmente el registro del mismo periodo de 2020 ($1,683 millones), momento en el que ya se habían detectado los primeros casos de coronavirus en el país, se habían impuesto restricciones a la actividad económica y aplazado el calendario de vencimientos de impuestos como medida de alivio.
De igual forma, el registro del primer cuarto de 2022 supera los $2,080 millones de ingresos corrientes recaudados en el mismo periodo de 2019, es decir, antes de la pandemia.
Del total de ingresos corrientes, los tributarios representan el 80%, con una suma de $1,756 millones, $409.5 millones más que el año anterior.
El crecimiento se registró tanto en los impuestos directos como los indirectos. En el primer grupo destaca el impuesto sobre la renta, con un aumento de 22.1%. El abogado tributarista Javier Mitre valoró el resultado de este 2022, comparándolo con los ejercicios en plena pandemia. Dijo que la variación es positiva respecto al periodo fiscal anterior, pero que esto es “la diferencia de un periodo fiscal catastrófico a uno en recuperación”.
El impulso se refleja principalmente en el impuesto sobre la renta pagado por las empresas, mientras que el pagado por personas naturales se contrajo.
En el grupo de impuestos directos está también el de inmuebles, que generó $40.1 millones, un 55% más que en el mismo periodo de 2021.
Mitre comentó que el resultado puede estar ligado al descuento de 15% para aquellos que pagaron el impuesto correspondiente a todo 2022 dentro de los cuatro primeros meses del año. Habitualmente este descuento es de 10% y se concede por el pago del saldo anual del impuesto durante los dos primeros meses del año.
Según el especialista, esto puede haber fomentado el pago antes del fin de abril de un impuesto que regularmente se cancela en tres partidas a lo largo del año.
Pese al descuento, “si contribuyentes que antes no pagaban se motivaron a pagar, eso puede haber tenido un impacto”, así como el hecho de que las tarifas del impuesto de inmueble son inferiores luego de una reforma legal que entró en vigor en 2019.
En lo que se refiere a los impuestos indirectos, el principal es el impuesto sobre la transferencia de bienes muebles y servicios (Itbms) a las ventas, que recaudó $278 millones, un aumento de $89.6 millones (47.5%) al compararse con el ejercicio anterior.
Pese al incremento, el resultado se queda corto en un 13.4% respecto a lo presupuestado para ese periodo. Esto quiere decir que si bien ha habido un incremento en el consumo, no es el que esperaban las autoridades, comentó Mitre.
En ese sentido, Gerardo Herrera, director del Departamento Jurídico-Tributario de la DGI, dijo que este es un indicador al que prestan atención y que han notado con frecuencia que hay comercios y restaurantes que utilizan plataformas de pago digitales y no emiten factura, cuando están obligados a hacerlo, con el consiguiente riesgo de que no se reporte el Itbms.
Los ingresos no tributarios sumaron $423.4 millones, cifra que supera el monto del año anterior y lo presupuestado para el periodo.
Dentro de este grupo, los principales aportes provienen de la actividad del Canal de Panamá, con $204.7 millones, así como la participación de utilidades de empresas estatales y aportes, que sumaron $64.6 millones, destacando entre ellos los $21 millones aportados por la Autoridad Marítima de Panamá.