Los problemas financieros del programa de pensiones Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), de la Caja del Seguro Social, sumado al constante incremento en la contratación de funcionarios y el alto déficit fiscal, está afectando a las empresas estatales, pese a que estas presentan finanzas saludables.
En su más reciente actualización sobre las notas de las empresa estatales, la agencia de calificación de riesgo Moody’s cambió de estable a negativa las perspectivas del Aeropuerto Internacional de Tocumen, la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), la Empresa de Transmisión Eléctrica (Etesa) y la Empresa Nacional de Autopistas (ENA).
Este cambio es consecuencia directa de la calificación Baa2, con perspectiva de estable a negativa, que otorgó Moody’s hace dos meses a la deuda sénior no garantizada y de emisor a largo plazo de Panamá.
A pesar que las operaciones de estas empresas estatales avanzan a buen ritmo, su perfil crediticio es bueno y es bajo el riesgo de incumplimiento de pagos, los fuertes vínculos financieros y administrativos con el Gobierno Central representan una exposición a tasas de interés y desempeño económico regional, entre otros, según la evaluación de Moody’s.
El economista Carlos Araúz señala que la perspectiva negativa otorgada por Moody’s es un llamado de atención, una advertencia, concentrada hacia la falta de urgencia en atender la crisis del subsistema de pensiones en la CSS.
A pesar de la perspectiva negativa la agencia reafirmó la calificación de las emisiones que previamente había otorgado a cada una de las empresas estatales.
En el caso de la ACP, Moody’s mantuvo la calificación de deuda en A2 y la evaluación crediticia de referencia (BCA) en A2. No obstante, la agencia indica que es necesario realizar fuertes inversiones para mejorar la disponibilidad de agua para garantizar el tránsito de los buques.
En cuanto a Tocumen, el aeropuerto continúa con una calificación Baa2 y destaca la recuperación en el movimiento de pasajeros, incluso logrando números mensuales similares a 2019, cuando todavía no se había declarado la pandemia de la covid-19.
Para este año, la administración de Tocumen espera que la terminal aérea mueva más de 15 millones de viajeros, acercándose a los 16.5 millones de personas de 2019.
En su análisis, Moody´s indica que el perfil crediticio del aeropuerto puede verse restringido por la alta dependencia de los viajeros en tránsito, que representan más del 70% del movimiento que pasa por la terminal y que, para la agencia calificadora, tienden a ser más vulnerables a la competencia que el tráfico de origen y destino.
“La calificación se ve atenuada aún más por las métricas de apalancamiento relativamente más altas, aunque bajo un calendario de amortización cómodo y con una liquidez adecuada, luego de la emisión de mil 855 millones de dólares durante 2021″, sostiene Moody’s.
Con relación a las calificaciones relacionadas con las emisiones de la Empresa Nacional de Autopistas, la agencia de riesgo reafirmó la nota Baa3 para ENA Norte y Baa3 para ENA Master Trust, vinculados a la operación de los corredores Sur y Este.
Aunque la recuperación del tráfico por los tres corredores avanza con paso firme para regresar a los niveles de 2019, Moody’s advirtió que la ausencia de incrementos en los peajes durante los últimos 15 años se ha convertido en una debilidad para las finanzas de ENA.
Sobre la operación de ETESA, los analistas de la firma calificadora destacan el monopolio natural que tiene la empresa estatal sobre la infraestructura de transmisión eléctrica y reafirmaron la nota de Baa2.
Moody’s proyecta un incremento en el apalancamiento financiero de ETESA basado en el plan de inversiones proyectado por la compañía para mejorar la red de distribución en el país, inversiones que no están relacionadas con la construcción de la cuarta línea de transmisión, proyecto que se desarrollará con otro esquema que no incluye fondos de la empresa estatal.
Tocumen generó $179 millones en 9 meses
El Aeropuerto Internacional de Tocumen generó ingresos por 179 millones de dólares en los primeros nueve meses del año. Aunque la cifra supera con creces los 87 millones de dólares registrados en igual periodo de 2021, todavía está por debajo de los 192 millones de dólares obtenidos entre enero y septiembre de 2019.
De acuerdo con los estados financieros al cierre del tercer trimestre, la sociedad aeroportuaria tuvo una utilidad de 4.9 millones de dólares, luego de registrar incrementos en los gastos relacionados con el pago de salario y depreciación, y el pago de 72.3 millones de dólares para cubrir interés y otros costos vinculados con sus emisiones de bonos.
Los 179 millones de dólares reportados al cierre del tercer trimestre están compuestos por 111.7 millones de dólares en ingresos aeroportuarios, 53.4 millones de dólares en concepto de alquiler y concesiones y 13.8 millones de dólares en ingresos varios.
Voceros del aeropuerto indican que la recuperación financiera de Tocumen ha sido robusta en los últimos meses, superado los pronósticos que se tenían.
“La tendencia actual sugiere que al cierre del 2022 registraremos un buen desempeño con indicadores similares a los mejores de 2019. En ese sentido, lo importante es mantener la fortaleza financiera con base en un incremento sostenido de las operaciones, competitividad regional con nuevas rutas, destinos, atracción de aerolíneas; así como con el incremento de los ingresos no aeronáuticos y control del gasto”, respondió la gerencia del aeropuerto, ante una consulta de este diario.
El gerente de Tocumen, S.A., Raffoul Arab, comentó que de mantenerse la tendencia actual, en 2023 el movimiento de pasajeros rondaría los 16.8 millones de personas y en 2024 alcanzaría los 18 millones de viajeros.