El nivel de los lagos que surten de agua al Canal de Panamá se encuentra en mejores condiciones que hace un año, lo que le ha permitido a la ruta volver a la normalidad en la cantidad de tránsitos diarios permitidos al ubicarse en 36.
Luego de un largo período de sequía que se extendió entre julio de 2023 y abril de 2024, el Canal cierra su año fiscal este 30 de septiembre en mejor situación y con los lagos en un mejor nivel para permitir paso de embarcaciones con 50 pies de calado. Las recientes lluvias en el país así lo validan.
Según el monitoreo en tiempo real del Canal, este lunes 30 de septiembre, el lago Gatún marcaba 86.21 pies, cuando su nivel óptimo es de 87.99 pies. Mientras que el lago Gatún alcanzó los 226.86 pies y aún está por debajo del nivel óptimo indicado de 251.97 pies.
“Vamos a empezar este año fiscal 2025 fuerte porque el nivel de los lagos se está llenando”, dijo a La Prensa, la subadministradora de la Autoridad del Canal de Panamá, Ilya Espino de Marotta, al termino de su intervención en el foro de la Federación Internacional de Agentes de Carga (Fiata por sus siglas en inglés) que se reunió por primera vez en Panamá.
Marotta admite los desafíos que tuvieron que sortear este año fiscal que acaba de terminal para la ruta, con la disminución de los tránsitos a 24 entre noviembre de 2023 y marzo de 2023.
Se trató de la sequía más fuerte de los 70 años de historia de medición en el Canal y constituyó una prueba que pudieron sortear con estrategias para no poner en riesgo la operación ni a la industria marítima global que pasa la carga por Panamá.
“Con el tema de la falta de lluvia hicimos nuestro mejor trabajo para hacer la situación menos dolorosa para la industria”, expresó Marotta.
Indica que haciendo un balance desde que se permitió a inicios de septiembre regresar a 36 tránsitos diarios, ha habido días en que han pasado menos buques y otros en que han pasado incluso por encima de lo permitido.
“Vemos que le ha tomado más a la industria regresar, pero estamos viendo algunos días por encima de 36 tránsitos, y otros días con 32, pero en el balance se ve el aumento”.
Marotta agregó que la nueva medida de permitir la reserva de cupos de tránsito por un período más largo o también denominado Long-Term Slot Allocation (LoTSA) aplicado a las embarcaciones gaseras, ha sido bien acogida por la industria y este mes de octubre esperan iniciar con otros segmentos como los portacontenedores.
Aunque esta crisis hídrica puntualmente parece haber cerrado, con la llegada de la temporada de lluvias, el Canal mira hacia 2028 para prepararse para otra eventual llegada del fenómeno de El Niño que puede significar otro desafío hídrico, según han mencionado las autoridades de la ruta.
“Esta crisis hídrica nos ayudó a ver la importancia del Canal en el sistema logístico de Panamá, no nada más el tránsito por el canal, también el ferrocarril y por tierra. Nosotros estamos viendo otras fuentes hídricas para garantizar que un año como el que pasamos lo podamos manejar de menor manera”, agregó.
Precisó que el Canal se encamina a ser una ruta sostenible y hub logístico verde, con lo cual comenzará a aplicar incentivos para el tránsito de buques más sostenibles. “Se ofrecerá un cupo de reserva para esos buques en específico”.
La descarbonización también apunta a cambiar la flota terrestre del canal por vehículos eléctricos, nuevos remolcadores, instalar una nueva planta fotovoltaica y la digitalización de procesos además de un nuevo proyecto hídrico en río Indio.