Aunque el petróleo ha tenido una caída de casi 70% en el último año, el Estado panameño solo se ahorró en 2015, $5.7 millones o 6.5% en subsidio para el tanque de gas de cocina de 25 libras (11.34 kilogramos), comparado con el año anterior.
El año pasado el gasto estatal en este subsidio fue de $81.5 millones, según cifras preliminares de la Dirección General de Ingresos del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
La disminución de este gasto se atribuye a la caída en el precio de los derivados del petróleo, debido principalmente a la sobreoferta de materia prima que actualmente existe a nivel global. Sin embargo, algunos analistas afirman que la disminución debería ser superior considerando la fuerte caída del petróleo.
El monto del subsidio varía cada año, según la fluctuación de los derivados del crudo, reflejado en Panamá a través de los precios de paridad de importación que se determinan cada 14 días. (Ver tabla)
El cilindro de gas de 25 libras se vende en la ciudad de Panamá a $4.37, desde el 30 de septiembre de 1992 y en otras ciudades del país asciende un poco más por el cargo de flete.
Tan solo en el distrito de Donoso, en la costa abajo de Colón, este mismo cilindro se oferta en $7.00, mientras que en La Palma de Darién llega a $6.50.
El uso de este producto lo regula el Decreto de Gabinete No. 10 de 18 de marzo de 2009, exclusivamente para consumo doméstico residencial, de fondas, puestos ambulantes o temporales de venta de comidas, comedores escolares y populares.
Las sanciones a los comercios que sean sorprendido utilizando estos envases las impone la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (Acodeco). La institución multó con $789 mil 550, entre 2009 a 2015, a decenas de establecimientos por el uso indebido de este tanque de gas.
En 2015, las lavanderías y lavamáticos ocuparon el primer lugar en sanciones con 70 casos, seguido de los restaurantes y fondas (30 casos), las panaderías (28) y otros negocios (30 casos).
Administraciones anteriores han intentado establecer estrategias para que el cilindro de 25 libras solo se utilice para las clases más necesitadas. Incluso se estudió la posibilidad de repartir un cupón por familia para reclamar un tanque por mes, pero la iniciativa no prosperó.
El Gobierno establece los precios tope en este producto a través de un decreto ejecutivo cada seis meses.
Algunos sectores del país argumentan que los subsidios estatales deben ser reducidos y gradualmente eliminados tal como sucede en países desarrollados, porque afectan la economía interna del país.
“Tal vez el tanque de gas [de 25 libras] sea el más adecuado mantener socialmente por áreas o por un esquema diferente”, destacó el ex director nacional de Hidrocarburos Wolfram González. Pero dijo que hay que buscar fórmulas para controlar su uso, porque hay personas con casa de playa —que cuestan $300 mil y más— y usan este tanque de gas subsidiado.
En la plaza local están las empresas Tropigas de Panamá y LPG de Panamá (Panagas) que suplen de esta materia al mercado doméstico y ellas a su vez compran el producto a las compañías Petroport y Refinería Panamá.
Según cifras de la Secretaría Nacional de Energía, para 2014 se vendieron 59 millones de galones de gas butano, que es el que más se usa para cocinar alimentos, y otros 26 millones de galones de gas propano, este último de mayor uso industrial.
Además del cilindro de 25 libras, en el mercado se ofertan el tanque de 60 libras, cuyo costo actual está por los $28 y el de 100 libras en $42. Ambos productos están a libre y oferta y demanda para el consumidor. El precio promedio del tanque de 100 libras en el mercado fue de $60, en 2013; $50, en 2014 y $40 en 2015; lo que representa una caída de $20 durante los últimos dos años.
Los analistas afirman que aunque se trata de un ahorro, es poco lo que representa en el gasto familiar debido al incremento en los alimentos, la energía eléctrica, el agua, entre otros productos.