Autoridades de los ministerios de Desarrollo Agropecuario, Salud y Desarrollo Social se encuentran reunidos en estos momentos en las instalaciones de la Cámara de Comercio de Chiriquí con representantes de la industria cafetera para definir el plan a seguir para evitar los brotes de la Covid-19 en las fincas productivas.
En las tierras altas de la provincia de Chiriquí la cosecha de café del año agrícola 2020-2021 dará inicio a mediados de agosto y con ella se registra una gran movilidad de trabajadores en las fincas cafetaleras aumentando el riesgo de contagio del nuevo virus respiratorio.
En tiempos de cosecha llegan aproximadamente 10,000 recolectores de café a tierras altas chiricanas cada año.
Solo en Boquete, donde la cosecha empieza a mediados de noviembre y se extiende hasta finales de febrero, se esperan unas 5,000 personas.
Los recolectores que vienen de las zonas comarcales viven en campamentos de madera dentro de las fincas de café. Muchos se mudan con esposa e hijos y viven en habitaciones que incumplen con el distanciamiento requerido para evitar el contagio del nuevo virus respiratorio.
En este contexto los productores solicitan al Gobierno el establecimiento de albergues que les permita separar al personal contagiado de coronavirus del resto de los trabajadores para evitar que se paralicen las labores en las fincas cafeteras.
En la reunión participan Augusto Valderrama, ministro de Desarrollo Agropecuario, el gobernador de la provincia de Chiriquí, Juan Carlos Muñoz, representantes de los estamentos de seguridad y productores.