El Ministerio de Salud (Minsa) ha emitido una valoración en la que advierte que a los pacientes que necesiten oxígeno médico no se les puede suministrar este medicamento si no tiene un mínimo de 99% de pureza.
Su posición, en base a las normas técnicas que rigen el almacenamiento y administración de gases médicos, surge a raíz de una consulta realizada el pasado 17 de abril a la entidad, justamente por las condiciones que plantea la licitación que ha convocado la Caja de Seguro Social (CSS) para la contratación de plantas de oxígeno por $101.2 millones.
La licitación, que se ha convertido en una de las insignias de la administración de Enrique Lau, establece dentro de sus criterios técnicos que los concentradores de oxígeno de diseño médico que se estarían contratando deben proporcionar una pureza de oxígeno estable mínima del 99%. Pero con la opción de ajustar la pureza hasta 95%, dependiendo del requerimiento de concentración del hospital o necesidades de consumo.
Cuando el pasado 15 de marzo, los representantes de 10 compañías asistieron al proceso de homologación de la licitación, no faltaron las voces que advirtieron de los riesgos sanitarios al permitir un 95% de pureza, al indicar que bajo dicho parámetro ya no se trataría de un oxígeno medicinal.
Los funcionarios que participaron del proceso aseguraron que este punto sería modificado para que quedara claro que se solicitará una pureza del 99%, pero en los más de 30 documentos que han sido adjuntados a la licitación 2023-1-10-0-99-LV-490018, no se observan cambios de este tipo en los requerimientos técnicos.
El Minsa ha tomado partido en este tema luego que Baltazar Moreno, representante de Aceti-Oxígeno (actual proveedor de la CSS), les consultara sobre la pureza que debe tener el oxígeno para cumplir con las normas aplicadas en Panamá.
El entidad respondió que según el Decreto N°139 del 5 de diciembre de 2022, que aprueba el reglamento y la guía para las buenas prácticas de manufactura y almacenamiento de gases medicinales y el reglamento técnico DGNTI-Copanic 15-77- 999, para que el oxígeno sea considerado como gas medicinal se establece que cada lote fabricado debe ser producido lo más uniforme y homogéneo posible.
“ Al referirnos a la uniformidad y homogeneidad en los lotes significa que los lotes no deben liberarse si no cumplen con las especificaciones establecidas, en este caso, en el rango de 99% a 99.65% de pureza”, dijo el Minsa, a través de una nota emitida por la Dirección Nacional de Farmacias y Drogas.
También se le consultó a la autoridad competente si un concentrador de oxígeno con pureza de 99% podría brindar el servicio de forma no constante, tal como ha advertido previamente Moreno que ocurrirá si se contrata el tipo de plantas que pretende encargar la CSS.
Sin hacer alusión a la licitación en la que avanza la CSS, el Minsa dijo que esto no era posible, ya que no se estaría cumpliendo con el principio de buena fabricación y no se alcanzaría el objetivo de aplicar el oxígeno médico en situaciones en las que el metabolismo de los pacientes estuviese comprometido.
Se necesita 99% de pureza cuando un paciente no tiene capacidad de respirar y debe conectarse a una máquina ventiladora.
Estás máquinas están calibradas para trabajar al 99% de pureza o más. “Inferior a esto, no son capaces de hacer el trabajo o las mezclas necesarias para soportar la vida del paciente”, dijo Moreno. Igual ocurre, indicó, en episodios de sedación.
“Cuando el oxígeno tiene una concentración de 99%, implica que tiene menos impurezas como monóxidos o trazas de carburos que se encuentran en la atmósfera, las cuales producen contaminación”, pero este tema, tan vital, en la licitación se está perdiendo de vista, insistió.
El abogado Ernesto Cedeño ha pedido que se desapruebe la licitación porque en el pliego de condiciones gravitan inconsistencias y algunos puntos que pudieran poner en “riesgo la salud humana y el uso adecuado de los fondos de la CSS”.
La licitación se ha cambiado de fecha en varias ocasiones. La presentación de ofertas fue convocada inicialmente para el 15 de abril y luego pospuesta, a través de una adenda, para el 15 de mayo.
La última adenda de tiempo establece que la fecha de apertura de las propuestas será el 30 de mayo.
En el reciente anteproyecto de presupuesto aprobado por la junta directiva de la CSS ya aparece la primera partida para pagar parte de esta contratación, con la asignación de $19.7 millones para un proyecto que finalmente terminará costando $101.2 millones.