El 14 de febrero es el día de los enamorados y también el día de los restaurantes, las floristerías, las joyerías, chocolaterías y tiendas por departamento.
La celebración comercial de San Valentín se ha arraigado en el calendario festivo de los panameños. Pero en este 2024, el Carnaval o fiesta del Dios Momo desafía la costumbre de gastar “por amor”.
Este año, el 14 de febrero es apenas un día después de los carnavales y coincide con el inicio de la Cuaresma. Por lo que competir con las fiestas del rey Momo no es tarea fácil.
Muchos panameños viajaron y gastaron una importante parte de su presupuesto durante los cuatro días de celebraciones carnestolendas que terminaron este martes 13 de febrero.
Cerca de 140 mil vehículos se movilizaron hacia los distintos pueblos del interior del país, mientras que Colombia, México y Estados Unidos figuraron entre los destinos más visitados por los panameños durante las mencionadas festividades.
Esto, evidentemente, reduce el presupuesto disponible para celebrar San Valentín, y Cupido, el dios romano del amor, podría terminar lastimado.
El día en el que todo está por verse es el mismo 14 de febrero. Uno de los detalles más populares para estos días son las flores. Por eso, la forma en la que esta industria afronta la celebración se convierte en un barómetro de cómo irán las cosas.
Jorge Singman, del grupo de Cerro Punta, productor de frutas y distribuidor de flores, indicó que a diferencia de otros años, cuando las compras de flores se daban desde cuatro o cinco días antes de la celebración, este miércoles es realmente cuando se sabrá cómo se comportará el mercado panameño.
Sabiendo que los consumidores experimentarían otra dinámica para estas fechas, desde noviembre y diciembre de 2023, planificaron abastecerse con una cantidad de flores menor a la de otros años. En promedio, solicitaron un 30% menos de flores a sus proveedores.
Cerro Punta es un jugador importante en el mercado panameño. Singman reveló que venden sus flores a cerca del 90% de las empresas decoradoras, a floristerías desde Chiriquí hasta Colón y a 109 supermercados.
No obstante, en Panamá hay 23 empresas que realizan trámites de importación para el ingreso de flores y follajes, según el Ministerio de Desarrollo Agropecuario. Actualmente se introducen flores de cinco países, entre ellos Colombia, Ecuador, Estados Unidos, Holanda y Costa Rica.

Para estas fechas, las rosas rojas son las más codiciadas, un producto que llega a Panamá vía aérea, importado desde tierras que pueden proporcionar una mayor altura que la del Istmo.
Así como Cerro Punta redujo su inventario para estos días, lo hicieron también las floristerías que son sus clientes directos.
Toda la industria ha sido conservadora, intentando no quedarse con un inventario abultado de un producto perecedero, que después de cinco días se puede convertir en pérdida en caso de que no se venda.
Singman no descarta que durante el día de San Valentín los compradores se animen. Las rosas rojas son el centro y la atracción de la celebración, pero sabiendo que su costo dispara el precio de los ramos, suelen hacer combinaciones con girasoles, follaje o flores mixtas para abaratar el producto, manteniendo la calidad.

A las floristerías también les toca competir con cafeterías como Starbucks, que apuestan por bebidas teñidas del color del amor.
Supermercado Rey se suma a la escena de San Valentín, con dulces llenos de corazones. Pero pensando en quienes tienen presupuestos reducidos, también ofrecen “medio pastel”.
Después de varios días de pocos clientes, los restaurantes también tendrán que sortear el 14 de febrero con decisiones importantes; tener suficiente productos y meseros para atender a los clientes, pero tampoco exagerar y terminar con un día de pérdidas.
Las flores están por determinar si este mes será, como en otros años, una buena temporada.
El mes de febrero, con la celebración del día de San Valentín, noviembre con el día de los difuntos, y diciembre con el Día de las Madres, son períodos en los que la venta de flores alcanza su punto más alto.