Más de la mitad de los trabajadores que están ocupados en América Latina y el Caribe trabajan en la economía informal y no cuentan con protección social, ni salarios que les permitan salir del umbral de la pobreza.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) alertó que quienes laboran bajo esas condiciones de informalidad, tienen entre tres y cuatro veces más probabilidades de caer en la pobreza.
“La ocupación informal se asocia a empleos precarios con menores ingresos que no les permiten superar la pobreza monetaria (trabajadores pobres). Los trabajadores informales tienen entre tres y cuatro veces más probabilidades de ser pobres que los trabajadores formales, a la vez que explican entre el 70% y el 90% de la pobreza laboral total”, indicó el organismo que publicó el jueves 18 de julio, la Estrategia de Formalización para América Latina y el Caribe (2024-2030) conocida como Forlac 2.0.
Según el organismo, la tasa de informalidad en la región alcanzó el 52% este año, cuando en el 2022 se encontraba en 49.6% de las personas ocupadas. La tendencia es mayor en las áreas rurales.
“En el mundo, casi 2 mil millones de personas están en la informalidad, es decir, el 60% de los ocupados. En América Latina y el Caribe, la OIT estima que ese número está en casi 52%”, alerto Frédéric Lapeyre, director del programa de formalización de dicho organismo.
Uno de cada dos trabajadores en América Latina y el Caribe es informal
La tasa de informalidad promedio entre los jóvenes está en 62.5% siendo más alta en el medio rural con el 84%.


Ana Virginia Moreira, directora regional de la OIT en la región, dijo que es preocupante el incremento de la informalidad entre las poblaciones más vulnerables, incluyendo mujeres, jóvenes y los migrantes.
“Considerando la situación de la informalidad en la región y con un escenario de menor crecimiento económico en América Latina y el Caribe, hay que darle un nuevo rumbo a las políticas de formalización del empleo. No podemos erradicar el problema de la informalidad sin la voluntad al más alto nivel”, dijo Moreira.
En el caso de Panamá, la tasa de informalidad alcanza al 47% de la población económicamente activa, y abarca en números reales a 765,152 personas a agosto de 2023, que son las últimas cifras disponibles en el Instituto Nacional de Estadística y Censo.
El tema de los trabajadores informales, específicamente en el sector comercial ha estado en los últimos días en la palestra en el país, debido a que la alcaldía del distrito de Panamá, anunció un plan de desalojo y reubicación de los vendedores de varias calles y zonas del centro de la ciudad.
Se busca realizar un nuevo registro de estos trabajadores y que se formalicen a través de un listado de microemprendedores antes del 2 de agosto.
Mayor informalidad entre quienes tienen menor nivel educativo
Otro indicador está relacionado con el nivel educativo de los trabajadores. Quienes tienen un nivel bajo de educación —es decir, hasta seis años de escolaridad— presentan casi el triple de informalidad en comparación con aquellos que tienen un nivel alto —es decir, 13 años de educación o más.
La OIT propuso enfocar los esfuerzos en cuatro áreas: desarrollo productivo, empleo y desarrollo de competencias, política de protección social y el reconocimiento y cumplimiento de los derechos laborales y de sanciones e incentivos.

