Luego de tres meses desde que la Unión Europea (UE) realizó la auditoría a Panamá para verificar el cumplimiento de las recomendaciones para combatir la pesca ilegal, las autoridades han continuado el trabajo de coordinación para erradicar esta práctica en el sector pesquero.
Aún se desconoce el resultado de esta revisión de la cual Panamá depende para salir de la tarjeta amarilla que tiene impuesta desde 2019 por la UE y pasar a una tarjeta verde, o por el contrario, retroceder a la tarjeta roja que le impediría exportar mariscos a Europa.
El último acercamiento como parte de las medidas contra la pesca ilegal lo hizo la Autoridad de los Recursos Acuáticos de Panamá (ARAP) con los capitanes de barcos de arrastre a través del establecimiento de una mesa de trabajo y conversatorio para encontrar puntos de interés de cara a desarrollar una pesca sana, responsable y sostenible.
“La idea es establecer un diálogo con los capitanes de barcos de arrastre porque es un sector que aporta el 17% de la pesca nacional”, dijo el secretario General de la ARAP, Carlos Castro.
Se llegó a un acuerdo de establecer la agenda de trabajo, donde se aborden las multas, las zonas de pesca y los lineamientos sobre los dispositivos excluidores de tortugas (DET).
Las reuniones de estas mesas de trabajo se deben iniciar la próxima semana.
Ángel Ramírez, capitán de barco, calificó de positivo el conversatorio con la ARAP y dijo que espera que en la próxima reunión participen Mi Ambiente y el Servicio Nacional Aeronaval para dejar claro cuales son las zonas prohibidas de pesca.
De la pesca de arrastre dependen más de mil personas, dijo Ramírez, y añadió que ellos llevan el producto del mar más barato al mercado, entre estas especies el pargo rojo, corvina, langostino, camarón rojo y tití.
De acuerdo con las autoridades, el impacto de la pesca ilegal no sólo afecta a los recursos marinos y costeros, sino que también sirven para encubrir otros crímenes, como el tráfico de seres humanos, sustancias ilícitas y armas, entre otros, por lo que Panamá, ha declarado su compromiso de cero tolerancia a la pesca ilegal.