El anuncio de la pérdida del grado de inversión por parte de Fitch Ratings es una mala noticia, pero ya se esperaba luego de la ola de protestas en octubre y noviembre, y el posterior fallo de inconstitucionalidad de la Corte Suprema de Justicia sobre el contrato minero.
Cita la calificadora en su Informe: “La rebaja de la calificación de Panamá a ‘BB+’ refleja desafíos fiscales y de gobernanza que se han visto agravados por los acontecimientos que rodearon el cierre de la mina más grande del país”.
Luego señala: “la Corte Suprema de Panamá anuló un contrato con First Quantum Minerals para la operación de la mina de cobre Minera Panamá, luego de la reacción social a la aprobación del contrato por parte del Congreso”.
En una campaña electoral donde hay más preocupación en buscar “culpables” que soluciones a problemas que no entendemos, perder el grado de Inversión es lamentable, pero no es el fin del mundo. ¿Qué vamos a hacer?
Impacto de la pérdida del grado de inversión
Perder el grado de inversión tendrá cuatro efectos:
1. Aumento en las tasas de interés.
2. Incremento de la deuda pública.
3. Mayor costo de la financiación privada.
4. Menor Inversión Extranjera Directa”.
Todo financiamiento bancario subirá de costo, incluyendo tarjetas de crédito, préstamos de auto y préstamos hipotecarios. Al encarecerse el financiamiento comercial, también podemos esperar un aumento en el costo de la vida y el precio de las viviendas.
La inversión privada ha sido consistentemente superior a la pública
Aparte del impacto de la crisis minera, Fitch hace serios cuestionamientos al manejo de los fondos públicos, tamaño de Estado, endeudamiento, subsidios, crisis del programa de invalidez, vejez y muerte de la Caja del Seguro Social y otros aspectos asociados al gasto e inversión pública. Sin embargo, históricamente, la inversión privada supera con creces la pública.
En el 2012 se dio la proporcionalidad más balanceada ($1.3 de inversión privada por cada $1 de inversión pública), dada la coincidencia de la Ampliación del Canal, Línea 1 del Metro y obras de infraestructura.
Pero esta relación cambió de manera significativa. Por ejemplo, en el 2016 la proporción fue $4.8 privada por $1 pública, 2017 (5.8), 2018 (5.5), 2019 (5.2), 2020 (7.5) y 2021 (9.1), según datos del INEC.
El próximo Gobierno tendrá que reducir gasto corriente para incrementar la inversión pública, dado el deterioro de las condiciones para financiarlo con deuda externa.
Falta de liquidez, complicada “herencia” del próximo Gobierno
El nuevo Gobierno heredará esta situación, a la que se agrega que en el 2024 no se recibirán los $375 millones de la mina, el Canal estará aportando $700 millones menos al Fisco (debido a la sequía), la crisis del Programa de IVM se agravará y las metas de recaudación para el 2024 probablemente no se cumplirán.
Aunado a esto, existe una severa crisis de liquidez en la economía. Algunos indicios de que “hay menos plata en la calle” incluyen
El Gobierno Nacional le debe $1,700 millones a proveedores y contratistas
Los nuevos financiamientos bancarios al sector productivo nacional en el 2023 fueron $2,700 millones menos que en el 2019, según datos de la Superintendencia de Bancos.
La morosidad en tarjetas de crédito en el 2023 fue 14.4%, más del doble que antes de la pandemia (6.9%), indicativo de más gente usando deuda y no cash.
El número de tránsitos en el Metro y Mi Bus en Panamá durante el 2023 fue 23% inferior al del 2019, indicativo de menos gente desplazándose a sus sitios de trabajo (Panamá alberga 41% de los empleos del país)
A pesar de que en el 2023 el PIB superó los niveles prepandemia, Mitradel tramitó 115 mil contratos laborales menos que en el 2019 (-30%), con el consecuente impacto en el consumo.
Pagar deuda y mejorar confianza del sector privado nacional
Ninguna empresa puede operar sin cobrar. Haciendo un ejercicio de “matemática simple”, necesitamos inyectar por lo menos $4,400 millones a la economía urgentemente ($1,700 + $2,700).
El financiamiento bancario es “el aceite del motor de la economía”, El déficit de nuevos financiamientos 2023 vs 2019 ($2,700 millones) es síntoma de una mayor incertidumbre y desconfianza en el clima de negocios.
Dos de cada tres empleos privados en Panamá lo generan trabajadores informales y empleados de empresas con menos de 10 colaboradores. Los micro y pequeños empresarios, formales e informales, son la columna vertebral del empleo.
Nuestra crisis laboral no es de empleo, sino de confianza.