Una propuesta ciudadana que reposa en la Asamblea Nacional flexibilizaría el grado educativo para obtener las idoneidades para el ejercicio de la arquitectura y las ingenierías.
Se trata del Anteproyecto de Ley 63, el cual modificaría la Ley 15 de 1959 por la cual se regula el ejercicio de las citadas profesiones. El mismo busca corregir la “malinterpretación” que supuestamente hace la Junta Técnica de Arquitectura e Ingeniería, al interpretar como “idóneos” solo a aquellos que tengan títulos en ingenierías y arquitecturas, cuya carrera se completa como una licenciatura.
De acuerdo a Edwin Cepeda, proponente de la iniciativa, la ley actual discrimina a ciertos profesionales al considerar idóneos solo a aquellos que tengan títulos universitarios específicos, asumiendo como una consecuencia que está “dañando al país”, al limitar a un grupo reducido la representación legal y técnica de empresas que se dediquen a trabajos relacionados con estas especialidades.
En la exposición de motivos, el proponente añade que tal discriminación priva a individuos capacitados y talentosos de la oportunidad de empleo y avance profesional en su área de especialización, lo que “limita su capacidad de desarrollo personal y económico”, y que también limita la capacidad de las empresas y organizaciones de “contratar a los mejores talentos y profesionales calificados en el mercado laboral”.
El título -según la propuesta- “no es un indicador fiable de la capacidad para realizar un trabajo de manera efectiva”.
Adjuntos
Anteproyecto de Ley 063.pdfPor otro lado, la propuesta también flexibilizaría el requerimiento de idoneidad para las personas jurídicas constituidas como Sociedad de Emprendimiento, ya que las eximiría de estar autorizadas por la Junta Técnica de Ingeniería y Arquitectura si al menos uno de los socios esté legalmente autorizado como persona natural para realizar los trabajos en la respectiva área.
Además, se resignifica de forma poco clara el término “idóneo” como “una persona autorizada legalmente para ejercer la arquitectura una ingeniería o una carrera relacionada con la misma incluyendo técnicos o cualquier otro título universitario relacionado con el campo”.
Para el expresidente de la Sociedad Panameña de Ingenieros y Arquitectos, Gustavo Adolfo Bernal, esta propuesta entra en conflicto con intereses de quienes la proponen, antes y ahora. “La idoneidad no es un papelito, es una responsabilidad”, dice tajante.
Agrega que esta propuesta atenta contra la estructura académica de responsabilidad, conocimiento y seguridad humana que conlleva ser representante técnico de una empresa, o jefe de obra o responsable de trabajos que conlleven responsabilidades de las cuales no se tenga ni soporte ni respaldo académico, ni profesional ni de experiencia.
Bernal advierte que el relajamiento en medidas de seguridad o responsabilidad que atañen proyectos de infraestructura deben verse con cautela.
El proyecto se encuentra en etapa preliminar en la Comisión de Trabajo, Salud y Desarrollo Ocupacional.