Dino Mon es actuario. Esto significa que es experto en la aplicación de modelos estadísticos y matemáticos para la evaluación de riesgos en las industrias aseguradora y financiera. Fue designado este miércoles, 8 de agosto, como nuevo director de la Caja de Seguro Social (CSS) por el presidente José Raúl Mulino.
El mandatario cambió el rumbo de las últimas administraciones, que se decantaron por nombrar a médicos o administradores en la entidad.
Mon llega en el momento más crítico de la CSS, con un subsistema de pensiones en quiebra, severos problemas administrativos y tecnológicos, y enormes inversiones a la vista.
Su nombre fue uno de los que se barajó como director de la entidad desde la administración de Laurentino Cortizo, pero en ese momento su designación no se concretó, como tampoco se llegó a avanzar en una reforma al sistema de pensiones para frenar la erosión económica del subsistema exclusivamente de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM).
El actuario estuvo por más de 20 años al frente de Mapfre Panamá. A ese cargo renunció en el año 2018, cuando decidió emprender en el mundo de los seguros de forma independiente y en la consultoría, a través del Grupo USAAAR.
Entre 2022 y 2024, Mon asumió la responsabilidad como actuario asesor para el Proyecto de Transformación NIIF 17 en la Superintendencia de Seguros y Reaseguros de Panamá.
También participó, desde el ámbito privado, en los análisis y corridas que se hicieron para reformar el sistema de pensiones de la CSS en el año 2005.
Mon habría estado en algunas mesas de trabajo en las que se analizó la crisis del sistema de pensiones, cuyos resultados fueron entregados al presidente Mulino.
Dicho acercamiento habría sido un punto a favor del actuario para que el mandatario lo designara al frente de la CSS.
Un actuario desempeña un papel crucial en la reforma de los sistemas de pensiones. Analiza la sostenibilidad a largo plazo mediante proyecciones detalladas de beneficios y costos.
Además, crea modelos de escenarios para evaluar el impacto de posibles cambios o reformas y asesora sobre estrategias de inversión que maximicen el rendimiento de los fondos.
Mon ha expresado, públicamente, que los fondos del subsistema exclusivo de beneficio definido se agotan este año.
La duda, sin embargo, es cómo los jubilados continúan recibiendo sus cheques. Mon ha explicado que, en el corto plazo, la actual administración puede ajustar las cuentas y manejar el flujo de dinero para evitar problemas inmediatos. Sin embargo, este Gobierno no tendrá la capacidad de seguir postergando dicha situación.
Hace dos años, indicó que el Gobierno probablemente no podrá evadir aportes por $1,000 millones al año, mientras que otros $1,400 millones se conseguirían a través de cambios en los parámetros del sistema.
De acuerdo con los últimos reportes de la Junta Técnica Actuarial de la CSS, se necesitarían más de $14,000 millones para cubrir el pago de las pensiones durante esta década.