La actividad en la industria manufacturera de China frenó en marzo tras unos datos que los analistas consideraron “excepcionalmente fuertes” el mes anterior, aunque, pese a ello, batió igualmente los pronósticos de los expertos y marcó su tercer mes consecutivo de avance.
El índice gerente de compras (PMI, indicador de referencia del sector manufacturero) que hizo público la Oficina Nacional de Estadística (ONE) se situó en los 51.9 puntos, por debajo de los 52.6 de febrero pero superando las 51.5 unidades por las que apostaban la mayoría de analistas.
En este indicador, una marca por encima del umbral de los 50 puntos supone un crecimiento de la actividad en el sector en comparación con el mes anterior, mientras que una por debajo representa una contracción.
Según Julian Evans-Pritchard y Sheana Yue, analistas de la consultora Capital Economics, la manufactura se vio afectada por la debilidad de la demanda internacional y por la finalización de la campaña de restablecimiento de inventarios tras las disrupciones que habían sufrido las cadenas de suministro.
Caen las ganancias
-22.9%
es el porcentaje interanual de reducción de las ganancias obtenidas por las empresas industriales de China. La CNY alcanzó 887.2 mil millones en los primeros dos meses de 2023. La actividad industrial luchó por recuperarse de la caída causada por las interrupciones de covid-19.
La ONE también publicó ayer su PMI del sector no manufacturero, que mide la actividad en los sectores de servicios y construcción y que siguió creciendo con fuerza al pasar de los 56.3 puntos de febrero a los 58.2 en marzo.
Los dos citados sectores marcaron récords en marzo: en el caso de los servicios, por la recuperación de la actividad presencial tras el final del ‘cero covid’, con especial efecto en los comercios minoristas o en el transporte de pasajeros; y en el de la construcción, debido a un mayor gasto en infraestructura ante la concentración de apoyos fiscales en la primera parte del año, según Capital Economics.
Evans-Pritchard y Yue indican que los PMI “no dejan lugar a dudas sobre la fuerza que todavía mantenía la recuperación en marzo”, pero advierten de que el ritmo de estos repuntes frenará “inevitablemente” a medida que pase el año, en parte debido a que la economía ya ha pasado por un proceso de revigorización “en un período muy corto de tiempo”.