Honduras prevé exportar en la cosecha de café 2022-2023, que se inició la semana pasada, unos 7.2 millones de quintales (de 46 kilos), que le dejarán más de mil 600 millones de dólares, y con el reto de aumentar la mano de obra hondureña, dijo una fuente oficial.
El presidente del Instituto Hondureño del Café (Ihcafe), Pedro Mendoza, indicó que las ventas de café aumentarán en unos 1.1 millones de sacos con las de la cosecha 2021-2022, que concluyó con una cifra de 6.1 millones de quintales exportados y divisas por mil 448 millones de dólares.
Del total de la producción, 700 mil quintales se destinan al consumo interno del país, una cifra que el Ihcafe busca aumentar, señaló Mendoza.
El Ihcafe confía en que en la nueva cosecha los precios puedan mantenerse en un nivel aceptable que permita atender debidamente a las familias y unidades productivas.
El café sigue siendo la primera fuente de divisas por ventas al extranjero del país centroamericano.
Mendoza afirmó que las lluvias y la poca mano de obra para recolectar el café son los principales desafíos que enfrenta el sector cafetalero del país, el mayor productor de Centroamérica.
Tenemos la problemática de las fuertes lluvias que han estado azotando el país y la baja mano de obra, subrayó el director del sector cafetalero. Afirmó que la mano de obra hondureña es cada vez menos, por lo que los caficultores deben contratar ciudadanos procedentes de El Salvador, Guatemala y Nicaragua para trabajar en el corte del grano.
La gente joven se está yendo para otros países hermanos, principalmente a Estados Unidos y España, eso nos está afectando mucho como productores de café, explicó Mendoza.
La actividad cafetalera genera alrededor de un millón de empleos en los procesos de corte, beneficiado húmedo y seco, y transporte, de acuerdo con el sector.
El café representa para Honduras más del 5% del producto interno bruto (PIB) y cerca del 30% del PIB agrícola, según cifras oficiales.
