El magnate George Soros ha vendido las acciones que tenía en la compañía de vehículos eléctricos Tesla, fundada por Elon Musk, lo que ha propiciado poco después que Musk lanzara una hostil campaña en Twitter contra él, acusándolo de “odiar a la Humanidad”.
El Fondo de Gestión de Soros tenía un paquete de 16 millones de dólares en acciones de Tesla, que compró el año pasado, y se deshizo de ellas el pasado viernes, según la documentación del propio fondo que ha sido conocida este martes.
Sin hacer mención a la venta, Musk tuiteó que Soros (de 92 años) le recordaba a Magneto, un superhéroe de Marvel, sin que en un principio quedara clara la comparación, hasta que un usuario que conversaba con Musk aludió al supuesto pasado de Magneto como superviviente del Holocausto, como el mismo Soros.
Musk respondió entonces: “Estás asumiendo que (las de Soros) son buenas intenciones. Pues no lo son. Él quiere minar el entramado de la civilización. Soros odia a la Humanidad”, escribió.
George Soros, un capitalista simpatizante de la socialdemocracia, se ha convertido en la bestia negra de la derecha estadounidense más dura, y suele ser uno de los blancos preferidos de Donald Trump, quien lo acusa de tener comprada a una buena parte de los medios de comunicación.
Musk, que en los últimos tiempos ha ido virando más y más a la derecha, abraza así el odio contra Soros, quien por su parte no ha respondido a las invectivas del multimillonario propietario de Twitter.
Desde el punto de vista financiero, la venta de acciones por parte del fondo de Soros no parece haber afectado al precio de las acciones de Tesla, que cerraron hoy con una subida del 0.10 % en una jornada floja en Wall Street.
Según el Wall Street Journal, la junta de accionistas de Tesla, que se celebra este martes, estará más centrada en saber si Elon Musk dedica más atención a la empresa de vehículos tras nombrar a Linda Yaccarino el pasado viernes como directora ejecutiva de Twitter, la red social que ha acaparado su atención desde que la compró en octubre pasado.