Los mercados financieros, las calificadoras de riesgo y los inversionistas del mercado de valores internacional tienen los ojos puestos en Panamá, la razón, las próximas elecciones presidenciales y las expectativas sobre las decisiones que tendrá que tomar el nuevo gobierno para conservar el grado de inversión de las dos calificadoras que aún mantienen al país en un terreno seguro, Standard & Poor’s (S&P) y Moody’s.
S&P califica la deuda soberana de Panamá como BBB con una perspectiva negativa (desde el 7 de noviembre de 2023), a dos escalones de perder el grado de inversión, es decir, aún se mantiene en terreno favorable. Sin embargo, miran con detenimiento qué hará el nuevo gobierno para tomar una decisión.
“Vemos una posibilidad de que la calificación baje en el mediano plazo y por eso tenemos la perspectiva negativa. Ahora bien, si la perspectiva baja todavía estaría dentro del grado de inversión porque se colocaría en el último escalón del grado de inversión. Esto no significa que ya haya bajado sino que existe una situación que indica que existe la posibilidad, por eso estamos esperando como la situación evoluciona luego de las elecciones”, explicó a La Prensa Roberto Sifon-Arevalo, director gerente y jefe de análisis e investigación de esta calificadora de riesgo.
El experto precisó que están a la expectativa de saber cuáles serán los planes del nuevo gobierno que sea electo el 5 de mayo y cómo tratará los temas neurálgicos del país: Canal, actividad minera y manejo de la deuda, entre otros.
“Las perspectivas de Panamá que hemos hecho miran cómo ha caído el crecimiento y hay mucha atención lo que vendrá luego de las elecciones y cómo se tratarán los temas importantes con respecto al Canal, igualmente con lo que ha pasado con la minera y la deuda”, dijo Sifon-Arevalo, quien estuvo en Panamá y se reunió con banqueros, representantes del Ministerio de Economía y Finanzas y de la Autoridad del Canal de Panamá.
El analista de S&P indicó que para el mercado financiero internacional es importante que exista algún tipo de claridad de cuál es el rumbo que tomará la nueva administración de Panamá, por ejemplo, con el tema de la solución hídrica que requiere el Canal y la definición del tema jurídico en torno a la mina Cobre Panamá, que fue cerrada tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia que declaró la inconstitucional del contrato entre la empresa y el Estado panameño.
“Estamos esperando que haya algún tipo de claridad con respecto a estos temas luego de las elecciones, pero lo importante aquí es que la economía panameña sigue siendo muy diversificada, sigue habiendo inversión extranjera que viene al país, pero bueno obviamente que es importante cuando se tienen una situación complicada como la que se vivió [con la mina] que haya claridad de cómo eso puede tratarse”, expresó.
Para los inversionistas independientemente de si están o no de acuerdo con una actividad como la minería, lo que requieren es confirmar que en Panamá se preserva el Estado de Derecho y hay seguridad jurídica, coincidieron algunos banqueros y analistas que estuvieron presentes en el conversatorio con el analista de S&P en Panamá, que organizado por Sweet Water Securities, INC.
El director gerente y jefe de análisis e investigación de esta calificadora de riesgo indicó que en materia de la deuda panameña, como en otros mercados se han encarecido desde hace varios meses. Puso como ejemplo que el costo del financiamiento se ha movido del 8% a 9% en el que estaba hace unos años a cerca del 15%. “Esto significa que 15 centavos de cada dólar que se recupera se gasta en intereses. Esto solo mejora de dos maneras, por una parte se suben los ingresos con más impuestos o si crece más si los ingresos suben”.
Apuntó que si la economía vuelve a crecer a niveles de dos dígitos como se registraba antes, se ayudará a mejorar esos niveles de deuda a la par de que ve mucho potencial en otros sectores que tiene el país como alternativas a la necesidad de mejorar el flujo de ingresos.
“Por eso es clave saber qué hará el país con respecto al agua para la población y para el Canal debido a que la actividad del tránsito de buques se ha disminuido un poco”, añadió Sifon-Arevalo quien se reunió con la subadministradora de la ACP, Ilya Espino de Marotta.
Según la ACP por la reducción de los tránsitos se espera que los ingresos del Canal se reduzcan entre 500 millones y 700 millones de dólares en el año fiscal 2024.
Sifon-Arevalo precisó que si el país toma correctivos rápidos puede evitar una mala calificación a futuro. Además aclaró que Panamá aún mantiene el grado de inversión y siempre los análisis miran más allá de una coyuntura tomando en cuenta si hay una perspectiva de que la situación mejore o no a mediano y largo plazo.
Rogelio Renjifo, director general y socio de Sweetwater Securities Inc. señaló que es fundamental conocer de primera mano el análisis de los mercados financieros sobre la percepción de Panamá como es el caso de S&P.
Además cree que es factible que el país recupere la senda de crecimiento sostenible y se revista la mala evaluación que hizo Fitch al rebajar la calificación del soberano desde BBB- a BB+ y colocarla en un terreno de pérdida del grado de inversión.
“Vemos que los cimientos del sector financiero y bancario son sólidos, por lo que vemos que estos vaivenes de corto plazo [como la pérdida del grado de inversión de una calificadora] se pueden detener y dan tiempo para que el país se oxigene y retome el camino”, indicó.
Dijo que el acceso al financiamiento tanto interno como externo se mantienen y hay variables internas en el país que deben mejorar como la institucionalidad y generar más confianza.