Las ventas de autos nuevos notaron el efecto de los cierres de vías y las protestas que se dieron en el país durante el mes de julio.
Según información compartida por la Asociación de Distribuidores de Autos de Panamá (Adap), en el mes de julio se vendieron en el país 2,881 autos, cifra que representa una caída cercana al 11% cuando se compara con los 3,231 vehículos vendidos en el mismo mes del año anterior.
El presidente del gremio, Bogdan Batinovich, explicó que el resultado a la baja es consecuencia de los cierres de vías y de la carretera Interamericana, que provocó desabastecimiento de vehículos y repuestos en algunos lugares del país, con mayores afectaciones en provincias centrales y Chiriquí.
El ejecutivo dijo que en el mes se cerraron ventas que se venían trabajando en meses anteriores, pero por ejemplo, en la capital, el principal mercado, los cierres redujeron la movilidad de las personas y por lo tanto afectaron los prospectos de ventas.
Pese al bajón de julio, en lo que va de año el comportamiento del sector mejora los resultados del ejercicio anterior.
En concreto, en los siete primeros meses del año se registraron 23,008 nuevas unidades, cifra que supera en un 7% las 21,491 del ejercicio anterior.
Pese a que la tensión social no ha desaparecido, Batinovich confía en que a partir de este mes de agosto se recupere la normalidad desde el punto de vista de la demanda.
No obstante, la industria sigue estando afectada por las restricciones en la oferta, es decir, por las dificultades de los fabricantes de suministrar a tiempo los pedidos que hacen las distribuidoras.
Esto se debe a una situación de escasez de microchips y semiconductores que limita la producción de los fabricantes y se traduce, en la práctica, en que los tiempos de entrega de los vehículos se elevan.
Batinovich adelantó que este año no se celebrará la feria Panama Motor Show por las limitaciones de inventario de los distribuidores. Por la cancelación del evento y por las afectaciones de julio las expectativas de ventas para el conjunto del año se habrían rebajado desde 45,000 unidades a un nivel entre 41,000 y 42,000 autos.
