El 90% de las viviendas vendidas en 2020 por las empresas agremiadas al Consejo Nacional de Promotores de Vivienda (Convivienda) estaban en el rango de hasta $120 mil, informó Elisa Suárez, presidenta del gremio, al presentar este jueves 16 de septiembre el informe sobre resultado y proyecciones del sector.
Estas viviendas de hasta $120 mil entran en el rango del beneficio del interés preferencial.
El 8% de las ventas el año pasado correspondió a viviendas entre $120 mil y $350 mil y el 2% restante a unidades inmobiliarias de $350 mil hacia arriba, detalló Suárez, quien también preside la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (Apede).
Convivienda representa el 68% del volumen de las construcciones de viviendas sobre todo en el área metropolitana a través de las empresas promotoras afiliadas a esta organización.
En total, en 2020 se lograron entregar 4 mil 181 viviendas por un valor en ventas de $451.9 millones, un 48% por debajo de la cantidad de 2019, año que se vendieron 8 mil 34 viviendas.
El sector de la construcción de viviendas comenzó a tener una caída en 2017 y 2018, pero en esos dos años las ventas estuvieron por arriba de los resultados de 2020, año de la pandemia.
Según el registro de Convivienda, la caída en las ventas de viviendas el año pasado se dio en los distintos rangos que se benefician con la ley de interés preferencial hasta $180 mil.
Igualmente, el 22% o casi una cuarta parte de esas entregas de casas que se hicieron el año pasado fueron de interés social o viviendas que tienen un costo de hasta 60 mil dólares y que reciben el bono solidario de 10 mil dólares que otorga el Estado.
“Sería imposible sin el bono solidario que estas familias pudieran obtener una vivienda”, afirmó Suárez. En Panamá hay unas 200 mil familias con déficit habitacional.
“Sabemos que el 2020 fue especial y nadie esperaba que el sector de la construcción se mantuviera cerrado por siete meses”, dijo Suarez, pero recalcó que por ello es determinante la toma de decisiones del Estado.
En cuanto al inventario dijo que hay 5 mil 40 unidades inmobiliarias nuevas sin vender en las empresas afiliadas a Convivienda. De ese total, mil 805 son casas y 3 mil 222 apartamentos que no se habían podido vender hasta el año 2020.
En 2018 solo habían 3 mil unidades inmobiliarias en inventario de Convivienda, es decir, que el año pasado hubo un repunte de más de 2 mil unidades nuevas en inventario.
Suárez advirtió que esta realidad “nos golpea en la cara” porque mientras haya inventario de viviendas construidas, muy difícilmente hay inversión nueva, con lo cual se genera un impacto en la creación de empleos.
Para 2021 Convivienda proyecta construir 5 mil 461 viviendas con ventas por $623 millones, es decir, un crecimiento de 30%, que todavía estaría por debajo del 48% de la caída que hubo por la pandemia en 2020.
Se espera que en dos o tres años se logre el punto de equilibrio con un crecimiento promedio de 15% y 18%, que corresponde al comportamiento que se tenía antes.
Este año “se proyecta aumentar el rango de ventas en viviendas con un costo de $40 mil hasta $100 mil, en comparación a las entregadas en 2020”, dijo Suáreaz.
Recalcó que el impacto del sector construcción es importante para la economía del país porque en este 2021 se tiene una tasa de desempleo del 23% y un 35% de contratos laborales que aún se mantienen suspendidos.
En el sector de la construcción hay un 40% de los contratos suspendidos o cuatro de cada 10 empleos del sector.


