Las plataformas de consumo de música vía streaming han transformado la forma en que las personas escuchan las melodías, pero los artistas no se han mostrado del todo contentos con el nuevo sistema.
Prince, Taylor Swift y más recientemente Adele, son algunos de los que han protestado contra la alternativa que ofrece la emisión continua de la música sin descargarla, como Spotify, Apple Music, Google Play, Slacker, Tidal, Groove, Rhapsody, Amazon Prime y Deezer.
Ahora a Adele y compañía se le suma un considerable puñado de cantantes que han decidido retirar sus catálogos de canciones de internet desde el 1 de enero de 2016, en un intento por mantener los ingresos por la venta de su música.
A través de un comunicado conjunto, disqueras de artistas independientes y otras como Universal, Sony y Warner, confirmaron que varios de sus representados (Justin Bieber, Lady Gaga, Katy Perry, Bruno Mars y The Rolling Stones, por ejemplo) dejarán de estar presentes en los servicios de streaming.
El comunicado indica que los artistas han cedido su música estos años a los servicios de streaming para proyectarla a nuevas audiencias, pero no permitirán que terceros se apoderen de las regalías que les corresponde como dueños intelectuales de sus composiciones, montos cada vez más simbólicos si se compraran con las regalías de unos lustros atrás.
Se intentó negociar unas nuevas cifras de distribución de regalías, pero no se logró el acuerdo, afirma la nota.
Por lo tanto, todos aquellos suscriptores de estos servicios vía streaming no deben verse sorprendidos cuando desaparezcan de sus playlists las melodías de sus artistas favoritos.
La cantante Adele demostró que es posible generar buenos ingresos sin la necesidad del streaming cuando presentó a comienzos de diciembre su disco 25, el cual rompió los récords de venta en su primera semana de lanzamiento, sin permitir el streaming de este material, como sí lo había hecho con sus discos anteriores 19 y 21.
“Estoy orgullosa de mi decisión, y lo habría estado incluso si el álbum hubiera fracasado”, dijo Adele a la revista Time, en una guerra frontal contra Spotify y el resto de servicios. “Me parece un poco desechable, el streaming. Y yo creo que la música debe ser un evento”, agregó.
Ese fue el último empujón que necesitaban los artistas para rebelarse contra los servicios de streaming, que hasta ahora registran una creciente aceptación.
Las cifras arrojan que el streaming está tomando cada vez más auge. De acuerdo a la Asociación de Industria Discográfica de Estados Unidos, el 32% de los ingresos en el sector musical en el primer semestre de 2015 correspondió a esta tendencia, frente al 24% registrado a través de la venta de discos.
La plataforma líder es Spotify, que desde su lanzamiento en 2008 hasta la fecha cuenta con cerca de 75 millones de usuarios activos cada mes, de los cuales unos 20 millones están afiliados al plan de cuotas mensuales.
Hasta el momento, ninguna de las plataformas de música en streaming se ha pronunciado sobre la polémica. Lo que sí se debe tener claro es que un día como hoy, 28 de diciembre, no hay que creer todo lo que lea o escuche, porque podría quedar como una inocente mariposa. ¡Feliz Día de los Inocentes!