El esprínter francés Arnaud Demare (Groupama-FDJ) se impuso ayer sábado en la octava y penúltima etapa de la Vuelta a Suiza, al término de un circuito de 123 kilómetros por los alrededores de Bellinzona.
Demare superó al esprint al colombiano Fernando Gaviria (Quick-Step) y al noruego Alexander Kristoff (Emirates), un resultado esperanzador para el velocista galo a tres semanas para el inicio del Tour de Francia, el 7 de julio.
Este triunfo es el segundo de la temporada para el corredor del Groupama-FDJ, que anteriormente se había anotado la 1ª etapa de la París-Niza.
El australiano Richie Porte (BMC) conservó el maillot amarillo la víspera de una contrarreloj individual de 34 kilómetros en las calles de Bellizona, que encara como gran favorito.
No obstante, Porte solo cuenta con 17 segundos de ventaja sobre su inmediato perseguidor, el colombiano Nairo Quintana (Movistar).
El campeón del mundo Peter Sagan, que ostenta el récord de victorias de etapa en esta prueba (16 en 9 participaciones), se tuvo que conformar el sábado con la 4ª plaza, por detrás de tres grandes especialistas en el esprint que se reencontrarán en la Grande Boucle.
Los equipos de los velocistas no concedieron ninguna oportunidad a los últimos escapados de la Vuelta a Suiza, cuatro hombres que estuvieron siempre bajo control y fueron neutralizados a 6 kilómetros para el final.
Esta prueba por etapas que arrancó hace una semana con el triunfo en la contrarreloj por equipos del BMC de Richie Porte, concluirá hoy domingo con una contrarreloj individual en el cantón de Tesino, un recorrido que debería favorecer al australiano, muy cómodo en esta especialidad.
Porte cuenta con 17 segundos de ventaja sobre Quintana y con 52 respecto al holandés Wilco Kelderman (Sunweb).
En caso de victoria final, Porte sucederá en el palmarés al esloveno Simon Spilak (Katusha), demasiado lejos para amenazarle, a 1 minuto y 48 segundos del líder.

