Sin cumplir siquiera una temporada con el Atlético de Madrid, el delantero colombiano Jackson Martínez fue transferido al club chino Guangzhou Evergrande y se convirtió en el futbolista más caro en la historia del fútbol asiático.
Evergrande informó ayer que pagó 42 millones de euros (45.8 millones de dólares) por el ariete de 29 años, quien firmó un contrato por cuatro temporadas. El equipo indicó que Chachachá se incorporará al plantel para sus entrenamientos de invierno el 9 de febrero en Dubái.
Martínez llegó al comienzo de esta temporada al Atlético procedente de Porto por 38 millones de dólares, pero entre lesiones y bajo rendimiento, no consiguió asegurar un puesto titular en la rotación del técnico Diego Simeone. “Para mí ha sido un honor formar parte de este club, pero creo que ha llegado el momento de iniciar otra etapa en mi carrera”, indicó el delantero que, al igual que en el Atlético, no ha conseguido aferrarse a la titularidad en la selección colombiana. “Hemos hablado mucho estos últimos días y estamos de acuerdo en que es lo mejor para todos”.
Pese a una desaceleración económica en China, los clubes de ese país han seguido desembolsando grandes sumas de dinero a fin de hacerse de talento extranjero.