El príncipe jordano Alí Bin Al Hussein se planteó una tarea sumamente complicada: acabar con el férreo control que Joseph Blatter mantiene sobre la FIFA desde hace 17 años.
El príncipe, de 39 años y que ocupa una vicepresidencia de la FIFA, anunció ayer martes que será candidato a la presidencia del organismo rector del fútbol aunque cinco de seis confederaciones continentales ya han anunciado su apoyo a Blatter.
En el cargo desde enero de 2011, el príncipe no ha sido mencionado en las acusaciones de soborno e intercambio de favores que han causado descrédito a muchos de sus colegas.
La región que no se ha plegado a Blatter, la UEFA, que agrupa a los países europeos, tiene 53 de los 209 votos posibles e incluye a las antiguas repúblicas soviéticas, que tradicionalmente apoyan a Blatter.
Las elecciones presidenciales de la FIFA se celebrarán el próximo 29 de mayo en Zúrich.
