El Real Madrid buscará hoy sábado en Abu Dabi su tercer título consecutivo en el Mundial de Clubes, en un partido donde será claro favorito contra el anfitrión Al Ain, la sorpresa del torneo, que llega al partido de más prestigio de su historia con gran motivación.
Sergio Ramos, jugador del Real Madrid.
La ilusión desbordada, el deseo de pelear cada pelota y la fuerza mental para no rendirse nunca fueron claves para que el Al Ain derribara al River Plate en semifinales (5-4 en penales tras 2-2), evitando así la final soñada por muchos entre españoles y argentinos.
El Real Madrid, que llegó a Emiratos en un mar de dudas por su imagen de los últimos partidos, calmó los ánimos el miércoles con su victoria en semifinales sobre el Kashima Antlers (3-1) y ahora tiene ante sí la ocasión de revalidar su hegemonía mundial.
Si levanta el trofeo hoy sábado, el equipo español conseguirá su cuarto título en el Mundial de Clubes en su formato actual -los cuatro en los cinco últimos años-, superando en lo alto del palmarés a su rival FC Barcelona, que lleva tres.
Sumando las tres coronas logradas en la Copa Intercontinental, el antecedente directo de esta competición, el Real Madrid sumaría siete títulos.
Récord
Pero el peligro de este partido está en que la victoria puede llegar a considerarse una obligación por la diferencia de calidad de ambos planteles sobre el papel, mientras que una derrota desataría una crisis en el Santiago Bernabéu.
“Me parece un torneo precioso. Me gusta la idea de juntar a los campeones de las distintas confederaciones y disputar un campeonato del mundo. Tengo grandes recuerdos de pequeño de la Copa Intercontinental. Después me ha tocado venir varias veces. Es especial para mí, es una cuestión personal”, afirmó sobre este torneo el técnico argentino Santiago Solari, que lo ganó como jugador en su formato de Copa Intercontinental en 2002.
Su principal contratiempo para la final es el estado físico de Marco Asensio, que recayó el miércoles de su lesión en el muslo derecho.
En el partido ante Kashima, Gareth Bale se desmelenó con un triplete que le coloca en la tabla de goleadores históricos con un total de seis dianas, a apenas una del récord del portugués Cristiano Ronaldo (7), al que podría alcanzar o superar hoy sábado.