Suecia se sumó a México en la cima del Grupo F con triunfo 1-0 ante Corea del Sur ayer en el debut de ambos en el Mundial de Rusia, gracias a un penal que fue pitado tras recurrir a la asistencia en video (VAR) y que transformó Andreas Granqvist en el minuto 65.
Los suecos comparten el liderato del Grupo F con México, que el domingo había dado la principal sorpresa en lo que va del torneo, derrotando también por 1 a 0 a la vigente campeona, Alemania.
Suecia arrancó dormido, Corea del Sur amenazó con incomodar... intenciones nada más. Los Vikingos amarillos tuvieron ocasiones para definirlo en la primera mitad, pero fallaron al toparse con un seguro Jo Hyeon-woo. El VAR entró a escena en el complemento. El árbitro salvadoreño Joel Aguilar se sacó las dudas y le dio un penal que puso a prueba el temperamento del capitán Granqvist. Sin dudas y con un temple de acero, ante el rugir del estadio de Nizhni Nóvgorod, el defensa cumplió.
“En este caso, el VAR ni siquiera debería haber sido usado, la penalización era muy obvia”, señaló el técnico sueco, Janne Andersson, al finalizar el juego en el estreno mundialista del estadio de Nizhni Nóvgorod -una apacible ciudad de 1.2 millones de habitantes, ubicada a unos 430 kilómetros de Moscú-, Corea arrancó enchufado.
Los hombres de Shin Tae-yong tomaron el control del campo y el balón ante un equipo sueco que en los primeros 20 minutos deambuló y usó las faltas para frenar a su rival. Pero a partir de los 20 minutos el partido cambió.
Un embate sueco dejó al delantero Marcus Berg en posición par definir, el delantero aprovechó pero Jo Hyeon-woo le ahogó el grito de gol.
La llegada despertó a Suecia, con centros cruzados metió presión a Corea, que perdió por lesión a uno de sus hombres más lúcidos, Park Joo-Ho.