“Es prácticamente imposible”: al contrario que en 2017, los aficionados del Barça se mueven entre la desesperanza y el deseo de creer en otra remontada “milagro” mañana frente al París Saint Germain (PSG), tras perder 4-1 en la ida de octavos de la Champions.
“Vamos a París a ver si remontamos”, dijo un eufórico Joan Laporta el pasado domingo, poco después de ganar las elecciones a la presidencia del Barcelona.
Pero esta animosa declaración, en el marco de su victoria electoral, no esconde la dificultad de la tarea: el Barça de 2021 no es el del tridente MSN (Messi-Suárez-Neymar) que ganó la Champions en 2015 y tumbó a la defensa parisina en 2017 (6-1), remontando la dura derrota de la ida (0-4).
“Hemos de ser realistas. Ahora mismo, el socio del Barça da por perdida la eliminatoria (de octavos)”, dijo Joan Bertrán, socio del club catalán y presidente de la Penya Anguera, uno de los numerosos grupos de aficionados barcelonistas.
Sus palabras resumen el estado de ánimo con el que este Barça afronta la vuelta de octavos de Champions mañana: si había una pequeña esperanza antes de la famosa remontada del 8 de marzo de 2017, esta vez, esta es casi inexistente.
“Las remontadas épicas se hacen con público”, apuntó Joan Bertrán, cuando la mayor parte de los partidos europeos siguen condenados al silencio de los cierres sanitarios por la Covid-19.
En 2017, “jugábamos en casa, con público y el Camp Nou asusta, el PSG salió muy miedoso, eso acompañó”, recordó.
Y el discurso del técnico barcelonista de la época, Luis Enrique Martínez, había alimentado las esperanzas de una hazaña, recordó Alfredo Martínez, que sigue al Barça desde hace 30 años, para la radio Onda Cero.
“Antes del partido, Luis Enrique nos dijo ‘habrá un momento en la eliminatoria en la que nos meteremos’, pero no daba la sensación de que lo dijera 100% convencido y cuando mete el 3-0 me acordé de esas palabras”, dijo Martínez a la AFP.
“Los milagros van escasos y remontar un 1-4 será muy difícil”, afirmó, por su parte, Josep Pomer, un socio de 80 años que ha asistido a 20 finales de su club.
“He visto resultados de todo tipo, por lo tanto, podría ser. Alguna remontada épica hemos tenido; tengamos esperanzas”, añadió.
La pequeña remontada frente al Sevilla el miércoles pasado (0-2, 3-0 en la prórroga) en semifinales de la Copa del Rey dio cierto ánimo, pero el técnico Ronald Koeman mantuvo los pies en la tierra. “2-0 es más fácil, aunque tampoco sea fácil de remontar, 1-4 es otra cosa. Empezaremos el partido para ganar y durante el partido veremos si hay oportunidades de pasar”, dijo el entrenador holandés.