Unos 46 años han pasado del fallecimiento de Eugenio Yuyín Luzcando, pero el baloncesto nunca lo olvida.
La Liga Profesional de Baloncesto (LPB) de Panamá decidió honrar su legado al dedicarle la cuarta temporada a su memoria.
“Se escogió su figura por ser uno de los íconos del baloncesto en Panamá”, destacó Jair Peralta, presidente de la Federación Panameña de Baloncesto.
Peralta apuntó a Yuyín Luzcando como una de las “figuras más emblemáticas” que ha tenido el baloncesto panameño .
Y el próximo sábado 8 de septiembre, cuando arranque una nueva temporada de la LPB, su hijo y su nieto, ambos de nombre Eugenio, estarán presentes en el gimnasio de la Universidad Santa María la Antigua (USMA), junto a familiares, para celebrar su legado.
Recordando a Yuyín
“Su vida era el baloncesto”, destacó Eugenio, el menor de sus tres hijos.
Ya sea representando a Panamá como jugador en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1938 o dirigiendo al seleccionado nacional en los Juegos Olímpicos de México 1968.
Fue jugador, entrenador y también dirigente.
“Amaba el basquetbol, terminaba de trabajar e iba con los niños a la cancha”, narró su hijo.
“Incluso el día que falleció iba a despedir a un equipo femenino que se iba de viaje a un torneo infantil”.
El turno del nieto
Su amor por el baloncesto se expandió hasta su nieto, que ahora se prepara para debutar en la LPB.
“Mi padre siempre me decía que fue un grande, una leyenda”, destacó Eugenio.
Pese a vivir toda su vida en Chile, el recientemente graduado de la Universidad de Idaho State juega para la selección de Panamá.
Ese mismo día que arranca la LPB, Eugenio estará vestido con los colores del quinteto nacional, listo para representar a Panamá como lo hizo su abuelo, en un amistoso a jugarse a primera hora en la USMA ante Chile.
Pero más allá de representar a Panamá, también confesó que será todo un reto jugar en su primera temporada en la LPB como nuevo jugador del equipo de los Universitarios.
“Estoy súper contento de poder jugar en Panamá”.
Y sobre lucir el apellido Luzcando en su espalda, reconoció que más allá de sentirse orgulloso, significa toda una responsabilidad.
“Voy a jugar al 200% para poder levantar esa copa que tiene el nombre de mi abuelo”, dijo Geno Luzcando IV.
El gimnasio Yuyín
Para encontrar rastros del nombre de Yuyín Luzcando uno solo tenía que apersonarse al gimnasio principal del corregimiento de Bethania.
Pero ya no.
Después de varios años de deterioro, las autoridades finalmente decidieron remodelar sus estructuras.
“Uno pasaba por afuera y se veía feo, uno veía su nombre en la fachada y se veía todo deteriorado”, detalló su hijo Eugenio.
“Estuvo mucho tiempo que no se le hizo nada, solo algunos trabajos cosméticos como de pintura y algunos arreglos”.
Hoy en día, el gimnasio y el campo de béisbol, que fue fundado en 1970, están clausurados, y su nombre ya no aparece, mientras se realizan los trabajos de remodelación.
Unos trabajos que desde que se dio la orden de proceder, en diciembre de 2016, a un costo de 900 mil dólares, han ido bastante lentos.
Ya va un año desde que arrancaron los primeros trabajos en julio de 2017, y el área del gimnasio de baloncesto y sus gradas siguen igual de abandonadas.
“Por suerte ya se está remodelando completamente, aunque ha demorado un poco”.
“Esperemos que para principios del otro año esté listo, porque eso le va a dar otro look al área”, puntualizó el hijo menor de Yuyín Luzcando.