Vale lo que pesa, reza un dicho, pero en este caso, este factor juega un papel en contra de la atleta élite de judo Kristine Jiménez, en torno a su clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Desde el año pasado la atleta ha venido confrontando problemas para hacer su categoría (52 kilos), lo que la tiene en vilo de cara a obtener un cupo para la cita olímpica.
Estela Riley, presidenta de la Federación Panameña de Judo, dijo a La Prensa que Jiménez “tiene unas situaciones delicadas “en cuanto a su peso.
“Kristine tiene ya casi un año que no ha podido acceder a la categoría de los 52 kilogramos, por lo tanto no ha podido salir del país a entrenar hasta que no se normalice su peso”.
“Ella está entrenando de manera presencial desde el 3 de marzo en el doho de Pandeportes junto al equipo nacional de judo, bajo la mirada atenta de los miembros de la comisión técnica”, manifestó Riley.
Gran problema
Añadió que el “problema es grande”, ya que si estuviera clasificada y no hiciera el peso, sería imposible que fuera a Tokio, porque a la fecha tiene la cuota olímpica que le da el pase directo.
De acuerdo con Riley, Jiménez ha señalado que las restricciones por la pandemia y la ansiedad por el encierro han sido factores que le han causado ese “descuido”.
“El no hacer el peso no es debido a un asunto físico, pues su cuerpo tiene la capacidad de hacer la categoría por el estudio de grasa que ya se le hizo”, explicó.
“Es un tema de que le gusta comer como lo hacemos los panameños y ahora ha tenido que hacer ajustes con dietas y atención nutritiva”, agregó la dirigente.
El plan
Para Riley el plan con la atleta oriunda de Veraguas es que ahora que se están dando los entrenamientos presenciales, logre acercarse a su peso -del que ha estado inclusive una categoría de por medio arriba- y así pueda viajar a los campamentos, eso sí, con un entrenador a su lado.
Kristine estuvo en noviembre pasado en una competencia panamericana, en la que tuvo que hacer un esfuerzo extraordinario para hacer 57 kilos, ya que, según Riley, estaba por los 60, y a partir de allí, se le dio un plan de entrenamiento de manera virtual, pero continuó su situación.
“Ahora estamos enfocados en que a finales de abril pueda acercarse a su categoría para que pueda participar en los eventos que quedan previo a Tokio, para que ella pueda aspirar a la cuota olímpica”.
Por otro lado, Riley señaló que en el caso de Miryam Roper, quien prácticamente tiene asegurado su cupo a Tokio, la atleta se encuentra entrenando en Alemania, a la espera de que se dé el anuncio oficial de su clasificación.