Willson Contreras no había anticipado que su primera actuación como titular en una Serie Mundial iba a ser como el receptor de Jake Arrieta.
El novato venezolano sabe bien que el cácher habitual de Arrieta es Miguel Montero, pero los Cachorros tenían otro plan para el segundo juego de su primer Clásico de Otoño en 71 años.
El debut del pelotero de 24 años en Grandes Ligas se produjo hace solo cuatro meses. Todo salió a pedir de boca.
“La mente mía, puedo decir, no estaba en cácher. Me avisaron tarde”, dijo Contreras. “Me levanté con ganas de jugar y ganar. Cuando leo mi nombre en el lineup, yo dije: ‘Willson es hora de trabajar y de hacer un buen trabajo con Jake Arrieta’”.
Fue otra demostración de la imperturbabilidad del núcleo joven Chicago, liderado por Kris Bryant, Javier Báez, Kyle Schwarber y Addison Russell.
Ninguno se intimida o inmuta ante toda la presión, expectativas y euforia.