La ampliación a cuatro carriles de la carretera Interamericana entre David, Chiriquí, y Santiago de Veraguas tendrá un costo superior al contratado originalmente. El Ministerio de Obras Públicas (MOP) introdujo adendas a los cinco contratos en que se dividió la renovación de los 187 kilómetros que separan las dos capitales.
En 2013, el MOP adjudicó los cinco proyectos por un total de $1,086.1 millones. Luego de las adendas aprobadas por la actual administración, el costo total del proyecto será de $1,197.1 millones.
El ministro de Obras Públicas, Ramón Arosemena, explicó que se introdujeron mejoras al diseño de la carretera para reforzar la seguridad. Se incluyó a lo largo de toda la vía una barrera de concreto tipo New Jersey en el centro de la calzada, además de incluir hombros internos y eliminar la cuneta central.
También se incrementaron los puentes peatonales, se hicieron drenajes subterráneos, se solicitó la instalación de cintas sonoras en las líneas para que los autos vibren cuando se están saliendo de la vía. “La carretera tenía deficiencias de seguridad... Cada una de estas adendas tiene su justificación”, defendió el ministro.
La modificación más cuantiosa es al tramo adjudicado a la constructora brasileña Norberto Odebrecht, que es también el más largo.
El contrato original ascendía a $402.3 millones y la adenda fue de $39.9 millones, para sumar un total de $442.2 millones.
El tramo, entre Santiago de Veraguas y Viguí, tiene 71 kilómetros de extensión. La adenda fue firmada por el ministro Arosemena, Daniel Cansancao De Oliveira y Luciano Pithon Das Virgens —los dos últimos en representación de Norberto Odebrecht— el 21 de septiembre de 2016.
La Contraloría General de la República lo refrendó casi dos meses después, el 18 de noviembre de ese mismo año.
La firma y refrendo de la adenda se producen cuando la empresa brasileña es cuestionada e investigada judicialmente por sus casos de corrupción.
Su expresidente, Marcelo Odebrecht, cumple condena en Brasil por el vínculo de la empresa en la trama de fraudes con contratos de la petrolera estatal brasileña Petrobras, escándalo destapado por la operación Lava Jato.
La adenda se aprueba cuando ya había estallado el escándalo por los contratos de Petrobras.
Un mes después del refrendo, en diciembre de 2016, se conoció el acuerdo alcanzado entre el Departamento de Justicia de Estados Unidos y la constructora brasileña, en el que esta admitió la existencia de un esquema de corrupción para obtener contratos.
La constructora había pagado $788 millones en sobornos en 12 países para hacerse con contratos de obra pública. En Panamá, entre 2010 y 2014, la suma ascendió a $59 millones, según esta investigación.
El 27 de diciembre de 2016, es decir, algo más de un mes después del refrendo de la adenda, el Gobierno de Panamá comunicó que tomaría medidas para que Odebrecht desistiera de participar en futuras licitaciones y para prohibir la adjudicación o refrendo de contratos a la constructora brasileña.
Consultado sobre la firma de una adenda que eleva en cerca de $40 millones el pago a una empresa que ya estaba señalada por su participación en el fraude de Petrobras, Arosemena dijo que los contratos ya estaban vigentes cuando asumió la actual administración y que “mucho antes del escándalo estábamos planificando cambios a la carretera”.
Arosemena señaló que “ellos [Odebrecht] son los dueños de ese contrato y están cumpliendo con él. No puedes hacer unos tramos y dejar otro sin barrera”, manifestó.
CUATRO ADENDAS MÁS
Al tramo entre San Félix y Viguí, adjudicado en 2013 a Meco por $260.7 millones, se le incluyó una adenda de $23.8 millones, para hacer un monto total de $284.5 millones.
En estos 41 kilómetros se incluyeron trabajos similares al resto de los tramos, como la incorporación de la barrera central y la eliminación de cunetas, la mejor señalización de la calzada y la incorporación de siete pasos peatonales.
Al tramo entre San Juan y San Félix, del que está a cargo un consorcio formado por Cusa y Bagatrac, se le añadieron $7.5 millones en una adenda y el monto total del contrato pasó a ser de $94 millones.
Ese mismo consorcio se adjudicó la renovación del tramo David - La Pita por $118.3 millones. Una adenda de $15.4 millones eleva el monto total a $133.7 millones.
Por su parte, el tramo entre La Pita y San Juan, adjudicado a Conalvías por $218.3 millones, terminará costando $242.7 millones luego de una adenda por $24.4 millones.
El expresidente de la Sociedad Panameña de Ingenieros y Arquitectos Nicolás Real dijo no explicarse cómo se dan adendas a un contrato de diseño y construcción por unos aspectos que se deberían haber contemplado en el diseño original.
Defendió, además, que si el diseño lo hiciera el MOP para luego licitar la construcción, se minimizarían este tipo de correcciones.
Las obras llevan todas un avance físico superior al 95% y se tiene previsto su entrega de manera escalonada a lo largo del año, según el MOP.
Arosemena dijo que en los tramos que ya han abierto al tráfico se está monitoreando el comportamiento del asfalto, de la lluvia y los drenajes, entre otras cosas. Los contratos incluyen el mantenimiento de las vías por al menos dos años.
