El plan de inversiones del presidente Juan Carlos Varela para el sector agropecuario contemplaba la construcción de siete sistemas de riego en el país, pero tres años después de su administración, “los planes cambiaron”. Cuando finalice su periodo, solo se entregarán tres obras culminadas.
De los cuatro sistemas programados para la provincia de Chiriquí, están en construcción los de Alto Bambito, Río Sereno y Cordillera. Los dos primeros fueron adjudicados bajo la administración de Ricardo Martinelli.
Se trata de una inversión total de $52.2 millones entre los cuatro proyectos, de los cuales se han desembolsado más de $10 millones (ver ilustración).
“Los proyectos han sufrido algunas variaciones por cuestiones técnicas”, manifestó Jorge Luis Espinosa, director nacional de Ingeniería del Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA).
Los tres planificados en las provincias centrales no se desarrollarán. El sistema de riego La Coca, en Coclé, se canceló, y los de La Villa, en Los Santos, y Santa María, en Herrera, están en estudio.
Con el programa de infraestructuras de riego se buscaba garantizar la producción agrícola del país durante los 12 meses del año, en particular de productos como arroz, hortalizas (lechuga, repollo, cebollina), granos, carne y leche, todos alimentos fundamentales en la canasta básica.
Los sistemas de riego son necesarios para no depender de las variaciones climáticas, manifestó Celestino Rivera, presidente de la Asociación de Productores de Tomate Industrial de Los Santos.
Cuando se tiene acceso al recurso hídrico se puede decir que el 90% de la producción de alimentos está garantizada, aseguró el agricultor.
ZONA CENTRAL DEL PAÍS
El riego La Coca, en la provincia de Coclé, y adjudicado a la empresa Tragsa en 2014, se canceló por temas ambientales, informó el funcionario.
Este proyecto solo llegó hasta la etapa de diseños, porque al momento de hacer las consultas para el estudio de impacto ambiental una comunidad aguas arribas del sistema se opuso a su construcción, añadió.
“Se decidió cancelar el contrato y la empresa interpuso un reclamo que está en litigio”, dijo Espinosa.
Las dos infraestructuras planificadas para la región de Azuero se incluyeron en un estudio de obras multipropósitos que desarrollará el Consejo Nacional de Agua (Conagua). “La idea es hacer un mejor uso de los recursos hídricos y no solo enfocarnos en sistemas de riego para el sector agro”, aseguró Espinosa.
OBRAS EN CHIRIQUÍ
El plan quinquenal de la administración Varela para el sector agro en Chiriquí contempla culminar los dos proyectos heredados de la administración Martinelli (el riego Río Sereno y Alto Bambito) y licitar las obras de Cordillera y Monte Lirio.
Los sistemas de riego de Alto Bambito y Río Sereno, en Renacimiento, se adjudicaron al consorcio Riego de Panamá, conformado por la empresa Meco, S.A. y el Grupo Hermisan, de capital español. Ambas obras están en construcción.
El proyecto Río Sereno, que involucra una extensión de 160 hectáreas, incluye la construcción del sistema de riego y una planta poscosecha que aún no se ha iniciado.
El atraso en la construcción de la planta poscosecha se debe a que el diseño requirió de ciertas modificaciones para adecuarse a la producción del área, pero se estima que en ocho meses esté lista, explicó Espinosa.
De los tres contratos adjudicados, el de Alto Bambito es el que reporta el menor avance. La empresa recibió la orden de proceder en abril de 2014 y la obra solo tiene un adelanto del 15%.
La demora en este ambicioso proyecto se debe a problemas técnicos, manifestó el director nacional de Ingeniería del MIDA.
En los planos originales, las tuberías eran aéreas, pero ahora la empresa contratista recomendó que sean soterradas, debido a que la zona es considerada con altas probabilidades de sismos.
También se modificó la toma de agua. La que establecía el plano estaba ubicada justo donde en agosto de 2014 la crecida del río Chiriquí Viejo provocó el derrumbe parcial del camino que conduce a Cerro Punta. Luego se corrió 800 metros más abajo. “Realizar la modificación de la toma de agua requirió lograr el consenso entre productores y los residentes del área”, comentó el director nacional de Ingeniería del MIDA.
El riego Alto Bambito, que abarcará una extensión de 445 hectáreas, se estructuró en 5 bloques y beneficiará a 163 productores ubicados en las comunidades de Las Nubes, La Garita, La Amenaza, Altos Los Guerra y El Desierto.
El único proyecto que está casi listo es el de Cordillera. La obra, a cargo del consorcio Riego de Chiriquí, está en periodo de prueba, y de cumplirse el cronograma de trabajo empezará a funcionar a finales de octubre de 2017.
El riego de Monte Lirio, con una extensión de 250 hectáreas no se ha podido adjudicar. El acto de licitación se realizó el pasado martes 12 de septiembre, pero se declaró desierto. Ninguna de las tres empresas que participó de la reunión de homologación presentó propuesta.
“El proyecto insignia de esta administración es el riego de Alto Bambito, que solo registra un avance del 4%, y no creo que en 22 meses que le queda a la administración Varela se concluya”, advirtió Augusto Jiménez, vocero de la Asociación de Productores de Tierras Altas (Acpta).
Eduardo Carles, ministro de Desarrollo Agropecuario, manifestó que de los $73.9 millones asignados al renglón de inversión para la vigencia fiscal 2018, $3.1 millones se utilizarán para culminar sistemas de riego en la provincia de Chiriquí.
Según Carles, para avanzar con la construcción del riego de Alto Bambito en 2018 se necesitan $10 millones, pero el Ministerio de Economía y Finanzas le recomendó $2.5 millones.