Australia y Nueva Zelanda dijeron ayer que esperan salvar el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP, por su sigla en inglés) al alentar a China y otras naciones de Asia para que se sumen al pacto, luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, retiró a su país del tratado.
El acuerdo comercial, que Estados Unidos había firmado pero no había ratificado, era un pilar del giro a Asia del expresidente Barack Obama. El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, lo promovió como un motor de reformas económicas, así como un contrapeso al auge de China, que no es miembro del TPP.
Trump firmó el lunes una orden ejecutiva para retirar a Estados Unidos del acuerdo TPP de 2015, distanciando a Washington de sus aliados en Asia. El primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, dijo que había sostenido conversaciones con Abe, el primer ministro de Nueva Zelanda, Bill English, y el primer ministro de Singapur, Lee Hsien Loong, durante la noche sobre la posibilidad de proceder con el TPP sin Estados Unidos.

