Alibaba desarrolló con éxito su propio chip de inteligencia artificial, profundizando su incursión en los semiconductores justo cuando Washington tiene en el punto de mira a la industria tecnológica de China.
El gigante del comercio electrónico se une a una serie de grandes empresas chinas como Huawei Technologies que crean alternativas a software y hardware extranjero. Ayer, Alibaba presentó el procesador Xuantie 910 basado en un diseño de código abierto conocido como RISC-V que compite con el estándar mundial desarrollado por ARM de SoftBank Group. El nuevo chip puede propiciar un negocio de licenciamiento para Alibaba, que pondrá a disposición pública algunas de sus herramientas de software, pero cobrará por las características completas.
Xuantie es el primer producto elaborado completamente por una filial para fabricar chips que Alibaba creó el año pasado a fin de potenciar su incursión en los circuitos de vanguardia. Dirigida por la unidad T-head o Pingtouge, es parte de la expansión de la compañía hacia la inteligencia artificial y el desarrollo de tecnología fundamental para internet de las cosas. Si su negocio de chips tiene éxito, podría introducir una nueva fuente de ingresos e impulsar su floreciente división de servicios en la nube.
Alibaba se une a un grupo de corporaciones chinas que buscan reducir la abrumadora dependencia del país de chips extranjeros, un desequilibrio puesto en el tapete por las restricciones a la venta de tecnología estadounidense a Huawei. China importa actualmente cerca de tres veces la cantidad de chips que produce en el país y gasta más en semiconductores que en petróleo. Washington está siguiendo de cerca los avances de China en el diseño de chips, que tienen el potencial de acelerar un cambio en la forma en que se produce el hardware computacional mundial.
Las compañías chinas nunca han competido con Estados Unidos, Taiwán y Corea del Sur en la fabricación de los chips más avanzados, pero tiene la capacidad de diseñar chips de vanguardia, como lo demuestra la unidad HiSilicon de Huawei. En teoría, podría establecerse en el segmento de los llamados semiconductores de inteligencia artificial, diseñados para manejar tareas como reconocer objetos y voz.
