La subida de los tipos de interés de referencia del dólar implementada por la Reserva Federal tiene un efecto colateral en el mercado local de deuda.
Desde 2015, el banco central de Estados Unidos ha elevado las tasas un 1.75% en siete subidas, para dejarlas en el nivel actual de entre 1.75% y 2.00%.
En el mercado local, las tasas también han aumentado, pero la mitad, por lo que la diferencia entre los títulos del mercado internacional y los del mercado local se ha reducido.
Habitualmente, el mercado local ofrece mejores tasas de retorno a los inversionistas, pero con este fenómeno, esa ventaja competitiva se está reduciendo.
Además de ofrecer ahora más rendimiento, los títulos del Tesoro de Estados Unidos están libres de riesgo y son más líquidos, señala el financista Fernando Lewis. Es decir, si un inversionista quiere vender ese papel, lo puede hacer de manera instantánea, brindando una ventaja sobre un título local, que puede tomar más tiempo vender.
Los emisores locales, por tanto, deben ser conscientes de que “hay una competencia de afuera y ya no va a ser tan fácil captar esa plata de los inversionistas”, señaló el finacista.
La lógica de los mercados dice que cuanto más riesgosa es una inversión, mayor será la tasa de retorno que ofrece. No obstante, las diferencias entre los activos riesgosos y los seguros se ha estrechado, elevando el atractivo de estos últimos.
Mientras que los activos de riesgo han mantenido sus rendimientos a niveles similares o inclusive bajado, los rendimientos de los activos de bajo riesgo sí han subido.
“Después de muchos años, los activos de alta calidad se han vuelto una opción a considerar para los inversionistas”, señaló el financista Álvaro Naranjo.
Los analistas esperan que la Reserva Federal siga subiendo las tasas, pero no muy por encima de los niveles actuales.
Esto seguirá poniendo presión sobre los emisores locales, que, como ha sucedido en el caso de los depósitos bancarios, eventualmente deberán ofrecer mejores tasas para que sus papeles sean más atractivos para los inversionistas.