Apple Inc., presenta una dependencia de China que parece ser cada vez más su mayor desventaja.
La compañía de electrónica de consumo más influyente del mundo perdió $44.000 millones de valor de mercado cuando un par de pronunciamientos de Pekín y Washington resaltaron la operación de su enorme base de producción china, en donde se fabrican casi todos los iPhone del mundo.
El presidente estadounidense, Donald Trump, “ordenó” este fin de semana a compañías estadounidenses comenzar inmediatamente a buscar alternativas a la fabricación en China, situación para la que Apple no estaba completamente preparada, según el analista Daniel Ives de Wedbush Securities Inc.
“En el mejor de los casos”, dice Ives, Apple “podría sacar de China entre 5% y 7% de la producción de iPhone” a lo largo de 18 meses. La compañía necesitaría tres años para mover 20%, agrega, que sigue siendo menos del 25% de la producción de iPhone que Apple necesita para su mercado interno de Estados Unidos (EU). Por lo tanto, los aranceles estadounidenses a los productos procedentes de China afectarían directamente al mayor generador de dinero de Apple.
El principal socio de ensamblaje de Apple, Foxconn Technology Group, afirmó que tiene la capacidad de construir todos los iPhone con destino a EU de la compañía Cupertino fuera de China; sin embargo, todo indica que desplegarlo requeriría una gran cantidad de tiempo y dinero. El precio de las acciones de Apple recibió dos grandes golpes el pasado viernes a raíz de los últimos anuncios de aranceles.
Los comentarios del presidente fueron reforzados horas después por tuits que declaraban que EU aumentaría la tasa de aranceles existentes e inminentes sobre productos chinos. Las medidas de Trump fueron la respuesta a un anuncio anterior de que China planeaba imponer aranceles a importaciones estadounidenses por $75,000 millones.
Personas familiarizadas con la producción de iPhone han dicho que es casi imposible reubicar la fabricación del dispositivo icónico de Apple de forma mayorista debido a la dificultad de contratar una fuerza laboral calificada en otro lugar, un punto que el director ejecutivo de Apple, Tim Cook, también ha resaltado en público. El reto que significa replicar las complejas líneas de producción y la infraestructura necesaria también es un obstáculo importante.
Apple y su ejército de fabricantes por contrato, son colectivamente el mayor empleador privado de China, proporcionan trabajo a millones de personas.