El Ministerio de Trabajo de Argentina dictó una conciliación obligatoria para dirimir un conflicto que llevó a trabajadores de plantas procesadoras de granos a iniciar un paro por tiempo indeterminado.
Los obreros tomaron la medida de fuerza en rechazo a despidos en la agroexportadora Cargill, que busca hacer más eficiente su negocio.
En la resolución del viernes, el ministerio inicia un período de diálogo entre las partes por 15 días, y exigió al sindicato que deje sin efecto las medidas de fuerza y a las cámaras empresariales a abstenerse de tomar represalias contra los empleados.
“Todavía no estamos notificados”, dijo a Reuters Marco Pozzi, secretario de uno de los gremios. “Siempre acatamos estas resoluciones, cuando llegue lo haremos”, agregó.
