El BBVA, segundo banco en España, fue imputado ayer como persona jurídica por corrupción y otros delitos en un caso de escuchas ilegales a periodistas y personalidades del mundo económico y político, informó un tribunal.
“El tribunal imputa al BBVA por cohecho, revelación de secretos y corrupción en los negocios”, señaló a la AFP un portavoz de la Audiencia Nacional, una alta jurisdicción en Madrid especializada en asuntos financieros.
El anuncio se produce cinco días después de que la fiscalía anticorrupción se mostrara a favor de la imputación del BBVA.
A principios de julio, nueve responsables actuales y pasados del BBVA ya fueron imputados por los mismos delitos en esta causa, nacida de la investigación judicial contra un controvertido y opaco expolicía ahora en prisión.
Ejecutivo renunció
El BBVA admitió en enero haber contratado los servicios del grupo Cenyt dirigido por este expolicía, el comisario José Manuel Villarrejo, implicado en varios escándalos que sacudieron a las altas esferas del país, incluida la monarquía.
Durante años, Villarrejo, encarcelado desde noviembre de 2017, grabó secretamente sus conversaciones con dirigentes políticos, jueces y empresarios, y ahora se le acusa de utilizarlas para hacerles chantaje.
Según la prensa española, BBVA lo habría contratado en 2004 para acceder a miles de escuchas telefónicas a periodistas y dirigentes políticos y económicos con el propósito de impedir que el grupo de construcciones e infraestructuras Sacyr entrara en su capital.
En enero, el banco, que abrió una investigación interna sobre el caso, aseguró que “no se ha encontrado ninguna documentación que refleje el seguimiento e intervención de comunicaciones privadas” en sus primeras indagaciones.
El miércoles, el presidente del BBVA, Carlos Torres Vila, garantizó que el banco seguirá “colaborando activamente con la justicia“, asegurando que “ha venido aportando información a la causa desde su inicio.”