Los bancos de América Latina están implementando una iniciativa para trabajar de manera más coordinada en la prevención de los fraudes y ciberataques financieros.
En una reunión reciente en Boquete, Chiriquí, de la Federación Latinoamericana de Bancos (Falaban) se presentó el llamado “concentrador regional” de fraude, proyecto que busca crear una oficina con equipo, software y personal que se van a encargar, en un primer momento, de combatir el fraude con las tarjetas de crédito, uno de los más comunes.
Carlos Troetsch
Felaban
“Es un servicio que se le va a dar a todos los países de América Latina. Si se da un caso de fraude se comunica a este concentrador y el resto de los países puede tener esa información y aplicar políticas de prevención”, explicó Carlos Troetsch, banquero panameño que preside actualmente la Felaban.
Boquete fue la sede de la primera de las tres reuniones que celebra al año el gremio que agrupa, a través de 19 asociaciones, a 623 bancos y entidades financieras de América Latina.
De los 19 países que integran la Felaban, 12 estuvieron representados en la reunión de Boquete. Además de la iniciativa para coordinar la lucha contra el fraude, los banqueros abordaron temas relacionados con los medios de pago y la transformación digital.
En este sentido, se está trabajando en iniciativas para compartir experiencias en áreas como tecnología y las fintech (aplicaciones de tecnología de la información vinculada al sector financiero) con la intención de que los bancos conozcan los distintos niveles de desarrollo en la agenda de servicios financieros y que puedan aprovechar los avances.
La incorporación de la tecnología es clave para promover la educación y la inclusión financiera. Por ejemplo, el uso de los celulares permite llegar a las clases sociales más necesitadas, en lugares donde no hay acceso a la banca normalmente.
En materia regulatoria, una de las aspiraciones de la banca latinoamericana es “homologar las regulaciones y trabajar de cerca con los supervisores de manera que la regulación sea efectiva y basada en riesgo de una forma inteligente”, manifestó Troetsch.
Por otra parte, los banqueros acordaron hacer un estudio sobre la viabilidad de crear un banco de bancos latinoamericano que se enfoque en pagos.
La iniciativa busca rebajar la dependencia hacia los bancos corresponsales, ya que en los últimos años estos han reducido su exposición al riesgo, en un fenómeno que se conoce como de-risking, y que ha provocado que los bancos de la región y de otras economías emergentes hayan tenido problemas para mantener sus relaciones de corresponsalía, necesarias para las operaciones bancarias.
