Las conversaciones sobre el clima de Naciones Unidas, que buscan acordar las reglas del Acuerdo de París 2015, se estancaron debido a las diferencias sobre los llamados bonos de carbono para reducir las emisiones.
Si bien se publicó un borrador del paquete de normas que muestra que muchos puntos han sido resueltos, algunos países continúan enfrentados por las normas contables de futuros esquemas de permisos de emisiones.
Esto ha retrasado en repetidas ocasiones la sesión plenaria de cierre, cuando podrían salir chispas si persisten los mayores obstáculos para llegar a un acuerdo.
Un negociador dijo que, por ejemplo, a Brasil le preocupan algunas de las reglas que rigen los esquemas internacionales de bonos de carbono.