Dos grandes marcas del sector minorista de vestuario están en proceso de reducir su tamaño. La semana pasada, Gap Inc., presentó los detalles de su plan previamente anunciado de dividirse en dos compañías: una que abarcará únicamente su cadena Old Navy y otra para todo lo demás. Mientras tanto, J. Crew Group Inc., informó oficialmente la semana pasada que planea escindir su cadena Madewell.
Estas dos separaciones son las medidas adecuadas para dos empresas de vestuario que tienen problemas extrañamente similares: sus cadenas más nuevas tienen éxito, pero las más antiguas presentan dificultades. Las separaciones permitirán a los ejecutivos concentrarse con mayor atención en los problemas de las atribuladas marcas.
Pero los planes aún son arriesgados, en sus propios términos y debido a las mayores complicaciones resultantes de la guerra comercial del presidente Donald Trump. El último mes ha aumentado la enorme incertidumbre en torno a los aranceles para la industria del vestuario, luego de que Trump decidiera aplicar gravámenes a productos chinos por un valor de $300,000 millones.
Los minoristas del sector de vestuario normalmente dicen que lidiarán con esta situación al negociar con los proveedores. La envergadura es un gran activo en dichas negociaciones, ya que las compañías más grandes tienen la mayor ventaja.