La tasa de desempleo entre los estadounidenses hispanos descendió a 4.7% en noviembre, su nivel más bajo en los registros desde 1973.
Sin embargo, la cifra no refleja lo siguiente: al igual que otros sectores de la población estadounidense, una proporción menor de latinos tiene trabajo o busca uno en comparación con la época previa a la Gran Recesión.
Muchos se han jubilado, van a la escuela o se quedan a cuidar a miembros de su familia. La proporción de hispanos con empleo continúa abajo de su pico antes de la recesión.
El grupo demográfico de los hispanos es una categoría étnica que puede incluir cualquier raza. El presidente Donald Trump publicó el viernes un mensaje en Twitter relativo a la disminución en la tasa de desempleo entre los hispanos.
“La tasa de desempleo sigue siendo la mínima en 17 años, de 4.1%. La tasa de desempleo industrial cayó a 2.6%, la mínima jamás registrada. La tasa de desempleo entre los hispanos cayó a 4.7%, la menor jamás registrada”, escribió el mandatario.
Asimismo, la tasa de desempleo entre los veteranos que acaban de salir de las fuerzas armadas aumentó en noviembre, pero por una buena razón.
Muchos decidieron no quedarse sin hacer nada y comenzaron a buscar trabajo en forma activa, y si no lo encontraron fueron registrados de inmediato como desempleados. La creciente percepción de que vale la pena buscar trabajo es una señal alentadora.
La tasa de desempleo de los que han pertenecido a las fuerzas armadas en cualquier fecha desde 2001 aumentó a 4.6% en noviembre en comparación con 3.6% en octubre. En total, los empleadores crearon 228 mil puestos de trabajo en noviembre. La tasa general de desempleo se mantuvo invariable en 4.1%.