Tras un fallo unánime en un tribunal de arbitraje a favor de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), la administración de la vía acuática comenzó “inmediatamente” la gestión para recuperar el dinero que había dado en concepto de anticipo a Grupo Unidos por el Canal (GUPC).
El consorcio que construyó el tercer juego de esclusas debe devolver $847.6 millones a la ACP. De este monto total, dos bancos locales tienen cartas de crédito de respaldo por $547 millones de adelantos.
Ayer, durante la presentación de los aportes por mil 703 millones de dólares que hará el Canal al Estado por la gestión del año fiscal 2018, el administrador Jorge Luis Quijano informó que según el laudo arbitral los bancos locales tenían 48 horas para hacer efectivo este dinero y el mismo miércoles, cuando se conoció la decisión, la administración empezó el proceso.
Ese arbitraje se llevó a cabo en el mes de septiembre y el resultado fue que el consorcio GUPC tiene que devolver de inmediato los adelantos vencidos y además, pagar $13 millones en intereses garantizados, por no haber cumplido con el pago de los adelantos en junio pasado como estaba acordado.
Ilya Espino de Marotta
Vicepresidenta ejecutiva de Ingeniería y Administración de Programas.
De los $847 millones, $547 millones son de adelantos iniciales otorgados en 2009, cuando empezó la obra, respaldados con cartas de crédito; y los $299 millones restantes corresponden a adelantos otorgados en 2014, avalados por garantías corporativas, cuando GUPC paralizó los trabajos por problemas financieros.
Quijano dijo que también se presentó documentación ayer en Londres, Inglaterra, donde está la sede del banco Unicredit, para recuperar los $299 millones. Sin embargo, dijo que esto podría demorar porque se debe esperar una audiencia en marzo próximo.
Arbitrajes pendientes
Aún está pendiente de resolver reclamos presentados por GUPC por más de 5 mil millones por supuestos sobrecostos en la construcción del tercer juego de esclusas.
Aunque la ampliación del Canal comenzó operaciones hace casi dos años, todavía quedan pendientes tres reclamos por resolver con el consorcio GUPC.
En enero se debe desarrollar un arbitraje en el cual la ACP pide que se le reconozcan $54 millones de atraso de la obra y $21 millones de otro reclamo que fue reconocido por la junta de resolución de conflictos.
El mayor reclamo es el conocido como interferencia o disruption claim. En este, el consorcio incluyó todo lo que considera que le afectó para el desarrollo de la obra.
Ilya Espino de Marotta, de la vicepresidencia de Ingeniería de la ACP y quien ha estado de cerca con estos reclamos, dijo que aún no se tiene fecha para el arbitraje del disruption claim.
El tercer reclamo es sobre las compuertas, pero no se ha constituido.
