Cataluña corteja deliberadamente un impago de sus préstamos bancarios en tanto el gobierno separatista de la región trata de obligar al Estado español a realizar pagos de ayuda, según dos fuentes del sector.
Las autoridades en la capital regional, Barcelona, cuentan con que España intervenga y aporte los fondos que necesitan para cumplir los reembolsos de préstamos que vencen este año y apuestan a que el gobierno central se vea obligado a ceder porque los costos de un impago serían mayores para el soberano español, dijeron las fuentes, que solicitaron que no se las identifique discutiendo asuntos confidenciales. La región ya dejó impagos por lo menos dos préstamos bancarios, dijo el presidente regional Carles Puigdemont este mes, según el diario El Mundo.
Albert Puig, un portavoz del gobierno catalán, dijo que la región está tratando de persuadir a España para que libere fondos de ayuda debidos desde 2014. El miércoles, él dijo que “en ningún escenario” Cataluña entraría en impago.
El miércoles, los bonos catalanes con vencimiento en 2020 sufrieron el mayor hundimiento desde junio de 2013 después de que El Mundo informase que la región podría ser colocada en impago selectivo por la agencia de calificación crediticia Standard & Poor’s.
El rendimiento sobre la deuda subió 20 puntos básicos y estaba a 4.17% tras aumentar 84 puntos básicos durante la sesión previa.
El gobierno separatista en Cataluña, la economía regional más grande de España, está enfrascado en una batalla con las autoridades en Madrid en tanto lucha por independizarse. Puigdemont prometió prepararse para una secesión para mediados del año que viene, aunque el primer ministro provisional Mariano Rajoy dice que sus planes son ilegales.