Chile y Brasil firmaron ayer un Tratado de Libre Comercio (TLC) negociado en tiempo récord y que profundizará el intercambio de Santiago con su mayor socio comercial en América Latina.
“Pocos acuerdos de libre comercio en el mundo se han iniciado, negociado y firmado en un plazo tan breve de tiempo, lo cual constituye probablemente un récord”, dijo el presidente Sebastián Piñera, al suscribir el acuerdo junto al mandatario brasileño Michel Temer, en el palacio presidencial de La Moneda, en la capital.
El acuerdo, que tardó tan solo seis meses en ser negociado, viene a actualizar el Acuerdo de Asociación Económica (ACE) vigente entre los dos países desde hace 30 años, y la asociación chilena al Mercado Común del Sur (Mercosur) -del cual Brasil forma parte junto a Uruguay, Paraguay y Argentina- y que libera de aranceles el comercio bilateral.
Dentro de los puntos que establece el nuevo TLC destaca la eliminación del roaming telefónico luego de dos años de la vigencia del tratado, “lo que impactará en turismo, comercio digital y emprendimiento”, de acuerdo con las autoridades chilenas. Cada año, 500 mil brasileños visitan Chile, mientras que unos 300 mil chilenos van a Brasil.