El Gobierno chileno suscribió un préstamo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por $100 millones para avanzar en una agenda de probidad y transparencia, luego de una serie de escándalos de desvíos de dinero de empresas a campañas políticas.
El Ministerio de Hacienda dijo que el crédito se suma a otro préstamo por $130 millones firmado en diciembre del año pasado y que también apunta a respaldar un conjunto de medidas para mejorar el funcionamiento entre el sector privado y público.
“El apoyo que el BID está prestando (...) nos permite darle un ritmo rápido al avance de este conjunto de iniciativas, que necesitamos como país para separar los negocios de la política, dar mayor transparencia a la acción pública, elevar los estándares”, dijo el ministro de Hacienda Rodrigo Valdés. La autoridad destacó que según el BID, las reformas emprendidas por el gobierno de Michele Bachelet en este campo son un ejemplo para la región y serán un marco a considerar para avances de este tipo en otros países.

