Los negociadores comerciales de Estados Unidos (EU) y China planean reunirse nuevamente a principios de septiembre. La última ronda de negociaciones en Shanghái terminó con señales de que ambas partes discutieron respecto a las compras chinas de productos agrícolas estadounidenses, una exigencia clave del presidente Donald Trump.
Funcionarios estadounidenses —incluidos el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, y el representante comercial, Robert Lighthizer— concluyeron las conversaciones con sus homólogos chinos, incluido el vice primer ministro, Liu El, ayer. Los negociadores de Pekín y Washington discutieron sobre la importación de productos agrícolas de China desde EU, según sus necesidades, informó la agencia estatal de noticias Xinhua, y agregó que la reunión de septiembre incluirá a funcionarios de alto nivel de EU y China han alternado la sede de una serie de reuniones en su guerra comercial de más de un año.
Bienes agrícolas
En su declaración, la Casa Blanca especificó que Washington albergará la próxima reunión y que los temas discutidos esta semana incluían “transferencia tecnológica forzada, derechos de propiedad intelectual, servicios, barreras no arancelarias y agricultura”.
“La parte china confirmó su compromiso de aumentar las compras de exportaciones agrícolas de EU”, según el comunicado estadounidense. “Las reuniones fueron constructivas”.
La última ronda de conversaciones se celebró en el contexto de un nuevo arrebato de Trump, quien, tras la reunión de los delegados del martes, manifestó su percepción sobre la falta de voluntad de China para comprar productos agrícolas estadounidenses y que el gigante asiático continúa “estafando” a EU.
El People’s Daily, periódico del Partido Comunista, respondió a Trump con un comentario que decía que China no tiene motivos para “estafar” a EU, que nunca lo ha hecho y que China no hará concesiones contra sus principios sobre el comercio.