China defendió ayer la capitalización del BID para que pueda conceder más créditos y abogó por una reestructuración del sistema financiero internacional para evitar en el futuro crisis como la que azota al mundo.
Ante la 50 Asamblea del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que se celebra en la ciudad colombiana de Medellín, el gobernador del Banco Popular de China, Zhou Xiaochuan, reconoció que el mundo atraviesa por “un momento muy difícil”.
Destacó la importancia de una reforma porque “la política fiscal y monetaria no sirven si no se toman las medidas necesarias”.
Se debe “encontrar un rumbo para resolver esta crisis financiera y evitar que pueda repetirse en el futuro”, dijo, al abogar por la reforma necesaria de las instituciones financieras internacionales.
Zhou dijo que hay un consenso en ese sentido y por ello “hay que tener en cuenta a los mercados emergentes de países en desarrollo, aumentar su cupo en las organizaciones financieras internacionales”.
También hizo referencia al necesario “manejo responsable de los sistemas financieros internacionales, incluso del personal en los más altos niveles”.
Dentro de esa reforma es fundamental “una mayor vigilancia y supervisión” en esas instituciones como fórmula para lograr un mayor equilibrio económico, agregó.
El gobernador del Banco Popular de China destacó también las medidas encaminadas a “incrementar el ahorro” y puso como ejemplo el caso de Asia tras la crisis de 1998, cuando “afectó muchísimo a diferentes países, pero se frenó la especulación, se aprendió a utilizar el ahorro y aumentar las reservas”. “Eso tiene que ver con la reforma que puede introducirse para cambiar la situación” de crisis actual, matizó.
China entonces hizo uso de un paquete de 600 mil millones de dólares, pero explicó que “sólo una tercera parte vino del presupuesto (nacional), el resto del sector privado, con el apoyo del sector financiero, la banca comercial, aseguradoras, mercados de capitales, para estimular la economía”.