Convivencia entre dos generaciones

Convivencia entre dos generaciones


Un nuevo modelo de economía colaborativa se desarrolla en Panamá. Se trata de Aliver Life, una plataforma digital que busca conectar a dos generaciones mediante el alquiler de habitaciones.

Su creadora, Migna Villarreal, una enfermera de 55 años, explica que la idea de este nuevo modelo de negocio es lograr que jóvenes universitarios que viven fuera de la ciudad de Panamá puedan encontrar un lugar donde alquilar una habitación económica en la ciudad capital y además permitir que los adultos mayores que por lo general permanecen solos en sus hogares, puedan tener una compañía.

Para lograr esta conexión la emprendedora creó la página web: www.aliver.life.com, la cual permite que los jóvenes universitarios que tienen que gastar en transporte, comida y actividades recreativas, se inscriban en busca de una alternativa de hospedaje en la que puedan ahorrar. También funciona como una opción para cumplir con sus horas sociales, las cuales son obligatorias para poder graduarse, asegura.

Ante la duda sobre el rol que deben desempeñar los jóvenes en su trato con el adulto mayor respecto a atenciones médicas o limpieza por enfermedades, la emprendedora aclara que la relación entre las dos generaciones es simplemente para que puedan aprender a compartir y ayudarse.

Sin embargo, coordinar que todo este proceso se realice paso a paso y de una manera correcta dependerá principalmente de Villarreal y de su equipo de trabajo, integrado por Zuleika Cordero y Luis Luengo.

“Nuestro equipo actualmente trabaja en el desarrollo de convenios con varias universidades ubicadas en ciudad de Panamá, para poder ofrecer algo bueno al mercado ”, dijo.

A pesar de que la página web ya está operativa, el alquiler de hospedaje para jóvenes estudiantes se pondrá en marcha a partir del mes de marzo de 2018, cuando se inicie el periodo regular de clases universitarias.

ROMPIENDO BARRERAS

En 2016, Aliver Life ganó la convocatoria pública para nuevos emprendimientos que lleva a cabo la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt). El capital semilla otorgado para este nuevo modelo de negocio fue de 25 mil dólares.

“Ese dinero nos permitió arrancar con el proyecto, pero aún quedan muchas ideas pendientes, como por ejemplo, diseñar una aplicación móvil que nos permita estar al alcance de todos”, asegura Villarreal.

De acuerdo con el último estudio del Global Entrepreneurship Monitor (GEM, por sus siglas en inglés), un 43% de los emprendedores establecidos en el país tiene entre 45 y 54 años.

Para Villarreal, en este proceso de crear no hay límites.

“Ni la edad, el miedo al fracaso ni la falta de dinero puede ser un obstáculo. En nuestro caso tuvimos muchos factores en contra, sin embargo, sacamos adelante el proyecto”, asegura.

Entre sus recomendaciones para los nuevos emprendedores está que no hay edad para emprender, mucho menos cuando se trata de proyectos innovadores.

LAS MÁS LEÍDAS